Pablo Machín no salió contento del
Ramón Sánchez-Pizjuán el pasado jueves, durante el partido de ida de la Q3 de la Europa League frente al
Zalgiris lituano, en el que sus pupilos se impusieron por un exiguo 1-0 en el que los nervionenses, pese a mostrarse bastante superiores en ciertos compases del partido, sufrieron más de lo esperado en otros, evidenciando que aún hay mucho trabajo por hacer. "Al ser un equipo con una forma distinta de jugar necesitamos un tiempo, pero el equipo está asimilando bien los conceptos y son futbolistas buenos e inteligentes", destacó el técnico soriano en los medios oficiales del club tras el encuentro, reconociendo que está contento con la teoría, pero que aún falta bastante en lo que a la puesta en práctica se refiere. Todo ello, sin tiempo, afrontando este domingo la final de la
Supercopa de España en
Tánger ante un rival como el Barcelona: "Va a ser una excelente piedra de toque".
Por ello, fueron muchas las anotaciones que
Machín tomó durante el partido ante el
Zalgiris, tanto buenas como malas. Tareas a seguir potenciando frente al
Barcelona y aspectos por pulir ante un conjunto culé que, en la última ocasión que se cruzó al
Sevilla, le endosó un doloroso 5-0 en la final de Copa del Rey que hizo temblar los cimientos de la entidad, propiciando la salida de
Óscar Arias como director deportivo, poniendo a
Montella en la rampa de salida y acelerando el retorno de
Joaquín Caparrós, actual director de fútbol del Sevilla Fútbol Club, a Nervión.
Hay porteroQuedó contento Machín con
Vaclik ante los lituanos, el mismo día que Sergio Rico emigraba a la Premier de la mano del Fulham. Hay portero, estando ahora por ver qué pasará con el recambio del checo; el club confía en el canterano
Juan Soriano, pero también maneja la incorporación de otro arquero de garantías si se pone a tiro. Kiko Casilla es una opción.
Trabajo por hacer en la zagaHan llegado mimbres de sobra este verano para la línea de tres centrales. Gente experimentada como
Sergi Gómez y músculo y juventud como
Gnagnon. El Zalgiris, en cambio, demostró que aún hace falta trabajarla y que sea igual de compacta cuando faltan los teóricos titulares.
Arana tiene que mejorarEl carril izquierdo está cubierto, en principio, con
Sergio Escudero y el brasileño
Guilherme Arana, quien ha ganado protagonismo con la llegada del técnico soriano a Sevilla. Pese a ello, el ex del Corinthians parece estar aún un escalón por debajo, olvidándose de su espalda en más de una ocasión y mostrándose menos incisivo de lo que se le presupone en ataque a la hora de pisar el área rival. Mucho mejor en la derecha, donde
Navas ya ha evidenciado estar a un alto nivel y donde
Aleix ha llegado y se ha vestido como titular casi sin entrenarse. Con su llegada, el rol de
Corchia queda en entredicho.
Buena sala de máquinasÉver Banega, ante los lituanos, no sólo demostró que Pablo Machín lo ha convertido en el dueño y señor del balón parado, sino también que la sala de máquinas carbura. El argentino le dio el sentido y el franco-camerunés
Ibrahim Amadou músculo y contención.
Roque Mesa también está de dulce y
Nzonzi, quien a priori saldrá y, sin apenas entrenamientos, no estará frente al Barça, siempre es una pieza clave mientras que defienda la blanquirroja.
La media punta, como el '9'
André Silva ocupará el vacío existente en el '9', donde ante los lituanos volvió a demostrarse que falta una referencia. El olfato goleador de
Ben Yedder no es suficiente, pues al franco-tunecino le faltan centímetros. Un recurso que bien podría sumarse a una media punta en la que únicamente viene brillando
Sarabia. Justo lo que quiere hacer Machín con
Muriel, al que los 21 millones de euros que costó le siguen condenando. El soriano reclama mucha más pegada de los mediapuntas, donde
Nolito rebosa calidad pero parece seguir en la línea del curso pasado y en la que Pejiño está brillando, pero sin exigirle más de lo que corresponde. No se descarta un refuerzo.