La segunda derrota consecutiva, en casa y ante el Getafe encrespó los ánimos de la afición del Sevilla, que acudió al Ramón Sánchez-Pizjuán con la ilusión de ver a su equipo recuperarse de la derrota en el derbi y salió del coliseo nervionense con muchas dudas acerca de su equipo, al que aún no ha visto marcar en LaLiga como local. Tímidamente en el descanso y con más fuerza al término del partido, una parte de la grada volvió a señalar al palco, y en concreto a José Castro, tras la derrota.
El 'Castro vete ya' fue un cántico recurrente en el tramo final de la pasada temporada y ha tardado poco en volver a ser entonado en esta 18/19. El equipo tampoco se salvó de los pitos de la grada, donde las dudas empiezan a cundir cuando apenas ha pasado un mes desde que la victoria por 1-4 en Vallecas con 'hat-trick' de André Silva disparara los niveles de ilusión nervionense.
El Getafe logró sacar los colores a un equipo al que aún le faltan muchas cosas para enamorar a su afición y reconectar con una de las piezas claves en los éxitos recientes del club. Sólo regresar a la senda de los buenos resultados cambiará la percepción y la primera oportunidad llegará el jueves ante el Standard de Lieja en la Europa League.
Enrique García2 min lectura