Mucho han cambiado las cosas para André Silva desde que debutase en Liga en Vallecas con un ‘hat-trick’. El portugués llegó a anotar siete tantos en las siete primeras jornadas de Liga, pero desde entonces sólo ha sumado dos más en el torneo de la regularidad, la última de ellas ante el Levante, el pasado 26 de enero.
Sus problemas físicos, además, sólo le han permitido jugar 8 minutos, frente al Alavés, en los cinco últimos encuentros, por lo que ya pocos dudan de que no seguirá en el Sevilla más allá de junio. Para este jueves, ante el Rayo, sigue siendo duda de momento, aunque se trata de un rival que le traerá sin duda buenos recuerdos. Una regreso al origen en una situación muy diferente.
Hasta última hora no se confirmará su presencia, aunque sea, en la convocatoria. Después, ya será si Joaquín Caparrós decide alinearlo de inicio ante uno de sus rivales fetiches o, si por el contrario, prefiere apostar por Munir como lleva haciendo en las últimas jornadas y el cual le está saliendo bastante bien. El luso solo acumula 11 goles en 40 partidos repartidos entre todas las competiciones, y necesita aumentar esas cifras en los escasos dos meses que quedan de competición si realmente quiere quedarse en la ciudad hispalense.
Fernando Mateos2 min lectura