La reciente aparición del
Girona en la elite del fútbol español provoca que sean escasos los precedentes con el
Sevilla. La de este mediodía, de hecho, será la segunda visita nervionense a
Montilivi, pero si a ello se unen las dos comparecencias gerundenses en el
Sánchez-Pizjuán, el balance comienza a pintar de claro color blanquirrojo. No en vano, los sevillistas cuentan por victorias sus tres encuentros frente al conjunto catalán, que llega con la soga al cuello después de seis derrotas consecutivas.
El único precedente en el feudo 'gironí', en los albores del pasado curso, se saldó con un triunfo hispalense por la mínima gracias al gol de Luis Muriel mediada la segunda mitad, con
Machín en el banquillo local y
Berizzo en el visitante. Una primera alegría que tuvo su continuidad en la segunda vuelta, también por 1-0, esta vez convertido por
Sarabia.
Menos sufrido fue el último triunfo nervionense, también en la
'Bombonera', esta misma campaña, en el que el centrocampista madrileño volvió a mojar, ampliando la renta obtenida por
Banega, de penalti, para el definitivo 2-0.
Será, además, la primera vez que
Caparrós y Eusebio Sacristán se vean las caras, con la intención del utrerano de que no hay tres si cuatro.