El Sevilla FC estará mañana en el sorteo de octavos de final de la Europa League después de sacar adelante una eliminatoria sufrida, aquí y en Croacia, y que acabó solventando gracias a la ventaja de la ida. La parcialidad del árbitro francés, que señaló un riguroso penalti mediada la segunda mitad y expulsó a Delaney en el 90', metió a un Dinamo con poco juego y menos mordiente en el partido e hizo peleigrar el pase en la eliminatoria. La desgracia, una vez más, vino en forma de lesión: Diego Carlos se retiró y, previsiblemente, será baja para el derbi. Lopetegui se queda sin centrales.
Julen Lopetegui, fiel a sí mismo de no pensar más allá del siguiente partido, alineó el mejor equipo que podía sacar ante el Dinamo y no pensó en el derbi del domingo. Y eso que llevaba dos goles de ventaja. Recuperó a Montiel, que sólo llevaba tres entrenamientos tras su lesión y no rotó en el puesto de '9', dejando claro que, ahora mismo, Rafa Mir está por delante de En-Nesyri.
El Dinamo dejó muy claro sus intenciones desde el principio. Esperar al Sevilla y atacar de la forma más directa posible. Y tardó cuatro minutos en ponerlo en práctica con un centro larguísimo de Ristovski, en el que Stefulj le ganó la espalda a Montiel y su centro-chut lo despejó Koundé.
El Sevilla trataba de no precipitarse, amasar el balón e intentar sacar al equipo croata de la zona de confort en la que se había instalado, con sus líneas muy juntas en defensa y sin apenas espacios.
Con unos sin arriesgar y otros sin necesidad de hacerlo, el partido resultó lento en los primeros minutos, en los que apenas había llegadas. El Sevilla sufría poco, pero no tenía opciones de llegar al área contraria y era su rival el que se acercaba con más asiduidad a la meta de Bono.
El Dinamo Zagreb se fue animando poco a poco, presionando más arriba, aunque sin perder el orden, y apremiando al Sevilla en su salida ante la desesperación de Lopetegui. El técnico guipuzcoano apremió a su equipo para que adelantara líneas y, aún sin crear peligro, empezó a jugar en campo contrario y a no ver el balón tan cerca de su área.
Treinta y dos minutos tardó el equipo nervionense en finalizar una jugada de ataque, aunque el disparo de Rafa Mir se fue fuera. Era un aviso. El del Papu, tres minutos después, sí cogió portería, pero no tuvo problemas Livakovic para detenerla.
El Sevilla había superado definitivamente ese momento de zozobra y, aunque cuando el Dinamo robaba, se iba directo hacia la portería sevillista, ya tenía que salir más lejos y el equipo hispalense tapaba con más facilidad.
La primera parte agotaba sus minutos sin historia cuando llegó el mazazo. Diego Carlos se rompía solo -otro problema muscular- y dejaba al equipo de Nervión sin centrales para el derbi.
Lopetegui movió doblemente el banquillo en el descanso. un cambio por obligación y otro porque estaba pactado. Montiel, que salía de lesión, le dejó su plaza a Navas para que jugara la segunda mitad. Delaney ocupaba la plaza de Diego Carlos, pasando Fernando al centro de la defensa.
Pese al palo vivido justo antes del descanso, el Sevilla salió con otro aire en la segunda mitad y antes del minuto diez ya había creado tres llegadas con mucho peligro.
La primera, un remate de cabeza de Koundé, casi en el área pequeña, pero que le salió muy centrado. La segunda tras un centro al segundo palo que controlaba Delaney y, pese a sus dudas, casi supera a Livakovic. Y el tercero, un centro del Tecatito, en el que el defensa le sacaba el balón a Rafa Mir cuando éste sólo tenía que empujar a la red.
Eran los mejores momentos de un Sevilla que por fin recordaban al equipo de toda la temporada, el de un sevilla dominador y que monopolizaba el control del balón. El Dinamo, que seguía esperando muy atrás, apenas inquietaba.
Sin embargo, en una jugada puntual sin aparente peligro, el balón golpeó en la mano de Acuña tras un rebote y el colegiado francés pitó penalti. El enfado de los jugadores sevillistas era lógico, pero el colegiado, lejos de corregir, amonestaba a Acuña y le 'amenazaba' con la expulsión.
Orsic lanzaba a la escuadra y hacía imposible la estirada de Bono, que había adivinado la intención. El partido se complicaba y ponía a un Dinamo que no había hecho apenas nada a un solo gol.
El Sevilla acusó el gol y pese a seguir teniendo el balón, notaba la tensión del marcador. Lopetegui trató de refrescar el centro del campo, pero su rival ya no tenía que perder y se fue hacia adelante. Fruto de ello llegó una doble ocasion que obligó a Bono a emplearse a fondo. Quedaba un cuarto de hora y mucho sufrimiento.
Pero con el Dinamo tan adelantado, los huecos atrás por fin aparecían y el Sevilla podía, por primera vez, correr. En una de esas jugadas, el Sevilla llegaba en igualdad al área contraria, Delaney se la ponía a Ocampos y el argentino, solo, cabeceaba muy desviado.
La siguiente llegada fue una contra de Rafa Mir que acababa con un disparo alto desde el borde del área. Fue su último servicio antes de dar paso a en-Nesyri.
El Dinamo, sin nada que perder, ya se había ido arriba completamente y Lopetegui esperaba aprovechar la velocidad del marroquí para matar el partido.
Los diez últimos minutos fueron de más tensión que juego. El Sevilla, atrincherado, apenas daba opciones a un rival que no se acercaba, mientras el Dinamo gastaba sus cartuchos tratando de llegar al área con la pelota controlada, con un fútbol menos directo del que fuera entendible. Pero en un encuentro tan raro aún tocaba sufrir más. Delaney cometía una falta en el 90' y el árbitro le mostraba la segunda amarilla. El miedo a tener que jugar una prórroga con uno menos planeaba en el ambiente. No fue necesario. El Sevilla está en octavos de final y mañana entrará en el sorteo.
Dinamo Zagreb: Livakovic; Théophile-Catherine, Sutalo, Franjic; Ristovski (Spikic 62'), Tolic (Bulat 53'), Misic, Gojak (Menalo 74'), Stefulj (Emreli 62'); Orsic y Petkovic (Bockaj 62').
Sevilla FC: Bono; Montiel (Navas 46'), Koundé, Diego Carlos (Delaney 46'), Acuña; Fernando, Rakitic (Jordán 71'), Papu Gómez; Tecatito Corona (Oliver 71'), Ocampos y Rafa Mir (En-Nesyri 81').
Goles: 1-0 (64') Orsic, de penalti.
Árbitro: François Letexier (francés). Amonestó a Acuña y Bono. Expulsó a Delaney (90').
Incidencias: Encuentro de vuelta de la Fase Intermedia de la UEFA Europa League, disputado en el Maksimir de Zagreb.
Antonio José Medina9 min lectura