Jugar en Heliópolis ilusiona a la selección española

Va a ser una fiesta por todo lo alto. El Benito Villamarín lleva 23 años esperando poder acoger un partido de la selección española y espera con ilusión el partido ante Inglaterra del próximo lunes día 15, valedero para la Liga de las Naciones de la UEFA. No obstante, la expectación es recíproca, porque en el vestuario de la 'Roja' son conscientes de que en pocos estadios del mundo se vive el fútbol con más pasión y de que el feudo del Betis ha sido siempre un talismán para el combinado nacional.

Así, el delantero del Chelsea Álvaro Morata confesó que están ya con “muchas ganas de jugar" contra los 'Pross', sobre todo “por hacerlo en casa”. "La gente va a responder y a animar, vamos a estar todos juntos y va a ser muy bonito. Seguro que en Sevilla van a estar muerte con nosotros", ha añadido este lunes, a su llegada a la Ciudad del Fútbol de Las Rozas (Madrid) para unirse a la concentración a las órdenes de Luis Enrique. El madrileño ha reconocido que "siempre es increíble" acudir a una convocatoria del combinado nacional. "La vez pasada estuvimos a un grandísimo nivel e hicimos dos muy buenos partidos y ahora tenemos una buena prueba contra Gales y un 'partidazo' contra Inglaterra en Sevilla", ha destacado el atacante.

En la misma línea que Morata se ha expresado el valencianista José Luis Gayà. "Para mí siempre es un orgullo poder defender a España con estos jugadores y el gran ambiente y el gran grupo que hay", apuntó el lateral izquierdo, quien ha advertido de que en la selección "no hay partidos amistosos". "Siempre hay que jugar al máximo y con la máxima intensidad", ha asegurado. Gayà espera "un partidazo contra Gales" y a una "afición entregada en un campo muy bonito", como es el Benito Villamarín, cuando se midan contra Inglaterra, "un grandísimo rival" el lunes día 15. "Van a ser dos partidos que nos van a servir para seguir creciendo como equipo", ha apuntado.

España ha disputado un total de 13 partidos en el Benito Villamarín, con un espectacular balance de 12 victorias y tan solo una derrota. Entre todos ellos destaca el inolvidable triunfo ante Malta (12-1) de diciembre de 1983, una gesta que dio el pasaporte para la Europa de Francia en 1984 y que aún perdura en la memoria colectiva de todos los españoles.