Estar inmersos en tres competiciones es lo que tiene, que te obliga a jugar prácticamente dos partidos por semana. Un
ritmo al que el Betis no estaba acostumbrado los últimos años, pero al que, de momento, parece que se ha adaptado sin problemas.
Sin embargo, tras el segundo parón por los compromisos internacionales de las selecciones, al conjunto de Quique Setién le viene un nuevo esprint con curvas importantes y ciertamente peligrosas. Como el resto de los equipos europeos, el Betis jugará
en los próximos 22 días siete partidos de tres competiciones diferentes, LaLiga, Europa League y Copa del Rey, toda vez que este viernes se sortean en la sede de la Federación Española los cruces de dieciseisavos de final del torneo del K.O., y cuyo encuentro de ida se disputará el próximo 31 de octubre, mientras que la vuelta no se resolverá hasta el 5 de diciembre, algo más de un mes después.
Con la Copa ya en marcha,
el Betis entra en una zona complicada de la temporada, ya que en las próximas tres semanas, además de medirse en dos ocasiones al Milan en la Europa League, también tendrá que enfrentarse a equipos como el siempre correoso Getafe o al Barcelona, con el que cerrará este esprint otoñal, en su estadio.
Para empezar, los verdiblancos se miden este domingo al
Valladolid. Un recién ascendido que ha arrancado la temporada de una forma espectacular y que se encuentra en la séptima posición, por delante de los verdiblancos. Tras ese encuentro por la zona europea, el Betis viajará a San Siro para medirse al
Milan en el encuentro quizás más importante de la Fase de Grupos, y que tendrá una segunda edición apenas quince días después en el Villamarín, el 8 de noviembre. Entre tanto, el Betis todavía tendrá que disputar
tres encuentros más. El primero inmediatamente posterior al choque en San Siro, será en el Coliseum Alfonso Pérez ante el
Getafe el domingo 28. Cuatro días después, cerrando el mes de octubre, los de Setién se medirán a
su primer rival en el torneo del K.O., que concerán este mismo viernes. Y ya el cuatro de noviembre, el Betis recibe en casa al
Celta de Vigo, un equipo en plena construcción pero con un potencial ofensivo importante.
No se moverá del Villamarín para recibir, como señalábamos antes,
al Milan el 8 de noviembre en la cuarta jornada de la Fase de Grupos de la Europa League, para, cuatro días después, viajar al Camp Nou a tratar de dar la campanada el 11 de noviembre. Será este encuentro el que cierre
tres intensas semanas para los heliopolitanos, que esperan, a esas alturas del curso, mantener vivas sus aspiraciones en todas las competiciones.
Isabel Morales3 min lectura