Wissam Ben Yedder encaja a las mil maravillas en el concepto de ambición que ha propiciado el crecimiento del Sevilla. Es el tipo de futbolista que cuadra a la perfección en la filosofía nervionense.
Por estilo. Por proyección. Por mentalidad. Mira hacia arriba sin separar los pies del suelo y con inmensa ilusión por avanzar de la mano del club que confió en él hace dos veranos. Como el Sevilla, siempre se pide más y está convencido de que esta temporada la afición disfrutará de su mejor versión tras una campaña en la que ya evidenció muestras de lo que puede aportar al máximo de su potencial.
Wissam se ha adaptado a la ciudad como sólo lo hace el que está realmente interesado en integrarse plenamente. Ha convertido el 'miarma' en su estandarte y sólo piensa en superarse a sí mismo: se encuentra en el lugar idóneo.
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