Aitor Torvisco6 min lecturaNo hace falta explicar la dimensión que el nombre de Diego Pablo Simeone tiene en la historia reciente del Atlético de Madrid, pero aunque nadie olvida la gran racha de títulos en 12 temporadas es imposible no sentir el desgaste. ¿Hasta cuando va a seguir el Cholo? Cada cierto tiempo salen noticias de que está agotado o incluso es él mismo quien transmite dudas sobre su continuidad desde sala de prensa, generalmente después de las decepciones. También se rumorea de cuando en cuando dudas en la directiva; pero luego el Metropolitano jalea al argentino y a todos se les pasa, como prueban dos hechos: en noviembre volvió a renovar, hasta 2027, y es el entrenador mejor pagado del fútbol europeo y es difícil imaginar el banquillo colchonero sin él. Eso sí, el día que se canse hay varios pupilos suyos que están deseando heredar su silla.
Hace unos días levantaba la mano Gabi Fernández, exitoso míster del Getafe B; y más de lo mismo con Fernando Torres, que dirige al juvenil del Atleti. Ahora, al mediocentro y al delantero les ha seguido ahora su excompañero Arda Turan, quien se ha ofrecido de manera muy directa a su exclub para relevar a Simeone después de convertirse en el entrenador revelación en Turquía este curso. "Visito a menudo Madrid para ver al equipo o a Simeone y muchos aficionados me preguntan si algún día me gustaría dirigir al Atlético. No te miento. Sé que no es fácil hacerlo mejor que Simeone, pero por supuesto me gustaría entrenar al Atlético de Madrid y ganar la Champions. Sí, ganar la Champions con el Atlético es uno de mis mayores objetivos como entrenador, pero es demasiado pronto para eso. Por ahora estoy muy contento en el Eyüpspor. Si algún día quiero competir con los mejores entrenadores del mundo, es el lugar perfecto para mejorar y trabajar duro", ha manifestado Arda Turan en una entrevista en el portal de análisis técnico-tácticos The Coaches Voice.
El exrojiblanco asegura que en su librillo de entrenador hay muchísimas influencias del 'Cholismo': "Siempre nos dijo la verdad. 'Aunque no tengamos tanto talento como ellos, podemos ganarles, ¿cómo? Corriendo y peleando más que ellos', nos decía. Cuando empezamos a conseguir resultados con esta filosofía, empecé a disfrutar del aspecto defensivo del juego, porque es una gran sensación jugar en equipo, no encajar un gol, no caer derrotado... Simeone tiene una máxima: 'Si no encajas un gol, siempre tienes la posibilidad de ganar el partido'. Sí, es una afirmación sencilla, pero es fundamental para conseguir los objetivos".
"Con él he aprendido que si te posicionas bien en defensa puedes organizar tu ataque de manera efectiva. Si defiendes, luchas por el balón y mantienes la posesión del mismo, tu confianza en ti mismo al defender y luchar te mantendrá en el juego. Te da más coraje. Un equipo valiente siempre lo tiene. Espero que este es un aspecto muy importante del fútbol. Luchar, estar en contacto con el rival y ganar el balón. Tuvimos jugadores como Godín, Miranda, Raúl García, Falcao, Diego Costa o Villa. Todos eran buenos jugadores de cabeza. Además, Gabi, Griezmann y Koke tenían mucho talento en las jugadas a balón parado. La combinación de estas habilidades con la táctica dio resultados muy exitosos", añadió de la etapa en la que más ha tenido que trabajar el aspecto físico.
"Simeone lo consiguió conmigo. No tenía ventaja física contra el rival y además era un jugador con tendencia a lesionarse. En partidos importantes y momentos críticos, Simeone me motivó de la manera correcta y siempre demostró que creía en mí. No perdí mi capacidad de liderazgo de ninguna manera. El tiempo no me detuvo, al contrario, me dio esta libertad, siempre me desafió tácticamente. Al final, fue él quien me dio esta visión, no sólo como jugador de ataque. Es el entrenador que me hizo mucho más productivo", remató, admitiendo que el Cholo le sacó un gen competitivo que ni el mismo turco sabía que tenía.
Después de salir del Atlético, Arda recaló en el Barça y, aunque con un rol mucho menos protagonista, tuvo grandes momentos de la mano de otro de sus entrenadores que más le marcaron, Luis Enrique Martínez: "Fue muy importante para mí desde una perspectiva ofensiva porque es un entrenador que ha desarrollado su sistema a la perfección. Los entrenadores suelen centrarse en la primera y segunda zona del campo y dejan la tercera zona para la creatividad de los jugadores. Sin embargo, a Luis Enrique también le gustaba preparar a los jugadores de la tercera zona. Creía en las capacidades de los jugadores, pero trabajó para garantizar que todos estuvieran en la posición correcta, reaccionaran correctamente, hicieran las carreras correctas y recibieran el balón en los lugares correctos".