Villa Gómez4 min lecturaEl Real Betis ha dado esta jornada un paso al frente importantísimo por Europa. Casi todo salió bien para los intereses verdiblancos, hasta el punto de que el conjunto heliopolitano depende ya de sí mismo para ser sexto y, por ende, jugar la Europa League por cuarta campaña consecutiva, un logro meritorio, habida cuenta del entendible bajón aparejado a las cuatro derrotas seguidas (frente a Atlético de Madrid, Villarreal CF, Rayo Vallecano y Girona FC) que le mandaron a la octava plaza. Imponerse al Valencia CF (1-2) permite a los del 'Ingeniero' encadenar dos victorias y respirar a las puertas del derbi del próximo domingo 28 de abril (21:00 horas) ante el Sevilla FC, una nueva tesitura que, echando la vista atrás, tiene muchos 'padres'. De un lado, la conjura que, esta vez de verdad, se ha producido en el vestuario, con una cena de equipo y un asado en la Ciudad Deportiva Luis del Sol auspiciada por los argentinos como rúbricas. Pero también se ha apelado a los talismanes.
El primero de ellos, el chandal de Manuel Pellegrini, una prenda con tintes mágicos para los más supersticiosos, especialmente desde que el chileno luciera esa prenda durante la final de la Copa del Rey 21/22, en la que su equipo se impuso por penaltis también al conjunto che para sumar un título diecisiete años después a las vitrinas de La Palmera. Aquel 23 de abril de 2022, el míster bético se dejó guiar por la cábala, que sigue presente, como bien argumenta el perfil especializado @LaLigaenDirecto. Y es que el de Santiago volvió a enfundarse la prenda deportiva oficial, esta vez de la marcha Hummel, y fue sinónimo de éxito. Porque son ya seis victorias y un empate en los siete últimos partidos de esta guisa, pues hace prácticamente dos años que no pierde con ella en el cuerpo. En concreto, el K.O. anterior con ropa deportiva data de ese curso, en la jornada 35ª: 1-2 frente al FC Barcelona el 7 de mayo de 2022.
Si bien es cierto que la reacción tras cuatro derrotas con indumentaria más formal llegó sin chandal, ante el Celta sí apareció Pellegrini transitando una vía intermedia: sudadera verde con capucha y pantalón azul marino, frente al traje oficial en tonos beige, con un jersey sobre una camisa clara, de sus ayudantes, Rubén Cousillas y Fernando Fernández Escribano. Sin duda, aunque también ha vencido esta temporada y las precedentes con vestimenta de todo tipo, el entrenador bético apostó sobre seguro para que la fortuna volviera a estar de su lado. Y a fe que Ayoze Pérez se lo agradecerá, pues a su calidad de unieron el oportuno resbalón de Mosquera en el 0-1 y el rebote en Jesús Vázquez en el 1-2.
