Alvaro Arenillas3 min lecturaWout Poels fue quien terminó sonriendo en el combate nulo de Jonas Vingegaard y Tadej Pogacar. El neerlandés culminó con éxito una larga escapada en la segunda etapa alpina del Tour de Francia 2023, la cual se vio influida por una gran caída en el pelotón que permitió que la misma cobrase mucha ventaja. El maillot amarillo y el esloveno llegaron juntos.
Lo cierto es que se esperaba mucho de una 15ª etapa de la ronda gala que terminaba en alto, exactamente en la cumbre del Bettex, de primera categoría; sin embargo, la realidad nos golpeó con una jornada de poca batalla en la lucha por el primer puesto de la general. A falta de menos de un kilómetro para la meta, Vingegaard resistió el único ataque de Pogacar y renunció a esprintar en la meta, en la que entraron juntos prácticamente igualados para seguir separados por solo 10 segundos en la general.
Donde sí hubo emoción fue en la lucha por el tercer puesto. Adam Yates, compañero de Pogacar en el equipo UAE, partía quinto con una desventaja de 37 segundos con respecto a Carlos Rodríguez y atacó en la última cima, movimiento que le sirvió para recortar hasta 18 segundos al ciclista andaluz.
El de Almuñecar, ganador el sábado en Morzine, se vio obligado a defenderse a la vez que atacaba... Así es, aunque apretó para no ceder demasiado con el ciclista británico, a la vez lo hacía para distanciar más al australiano Jai Hindley, que estaba un segundo por detrás y entró a 1.16 minutos después que el líder del Ineos. Tal lucha hace que Rodríguez siga tercero, ahora a 5.21 de Vingegaard, mientras que Yates es cuarto a 19 segundos del español. Hindley pasa al quinto puesto a 1.17 del podio.
Estando totalmente ajeno a esa pelea, Poels firmó la segunda victoria del equipo Bahrain tras la conseguida por el español Pello Bilbao en Issoire. En su entrada a meta dedicó el triunfo al suizo Gino Mader, compañero de equipo que falleció en una caída en el pasado Tour de Suiza.
El veterano ciclista, de 35 años, ganador de la Lieja-Bastona-Lieja de 2016, consiguió levantar los brazos por vez primera en una carrera de tres semanas, aunque le atribuyeron la victoria en la etapa 15 de la Vuelta a España de 2011 tras la descalificación por dopaje de Juan José Cobo. Sin duda, un gran momento para un ciclista que siempre ha estado en la pelea.