El siguiente desafío, superarse a sí mismos

De qué sirve superar un récord si luego uno se detiene y ahí termina el camino. La mentalidad del ganador le prohíbe parar para recrearse de los éxitos logrados y le obliga a mantener viva la lucha por seguir triturando y devorando registros. Ese es el afán que reina en el vestuario del Sevilla, donde, no contentos con igualar en 24 jornadas los 52 puntos con los que acabó la temporada pasada el equipo de Unai Emery, ahora los pupilos de Sampaoli afrontan el próximo reto: superarse a sí mismos. Y lo lograrán si este jueves los tres puntos se quedan en el Ramón Sánchez Pizjuán y el Athletic regresa a Bilbao de vacío.

La mejor primera vuelta de la historia del club nervionense en Primera división arrancó con un meritorio balance de 11 puntos de los primeros 18 posibles y, a a día de hoy, los blanquirrojos están con 10 de 15 en los cinco primeros duelos de la segunda ronda, por lo que, si vencen a los vascos, sumarán un 13 de 18 y superarán en dos puntos su propia marca del inicio del curso.

La primera temporada de Jorge Sampaoli en España comenzó con una loca victoria contra el Espanyol (6-4); un empate sin goles ante el Villarreal (0-0); una victoria por la mínima frente a la U.D. Las Palmas (2-1), choque que perdía por 0-1 en el 88’; un empate en Eibar (1-1), un corto triunfo en el derbi (1-0) y una derrota en San Mamés (3-1).

La segunda vuelta comenzó mal, con aquella polémica derrota contra los ‘pericos’ en Cornellà (3-1), marcada por un penalti y la expulsión de Pareja en el 1’. Siguió con otro empate sin goles ante el Villarreal, que es el único equipo al que este Sevilla no ha podido batir esta temporada.

A partir de ahí, encadena tres triunfos seguidos. Primero se convirtió en el primer (y único hasta el momento) equipo que se lleva los tres puntos del estadio de Gran Canaria, al vencer por 0-1 al conjunto amarillo. Después ganó al Eibar (2-0), uno de los equipos de moda este año, y al Betis (1-2) el pasado sábado, con remontada y ampliando a 11 los años seguidos que lleva ya sin perder en el Benito Villamarín.

Este jueves, el Athletic Club visita el coliseo de Eduardo Dato, un estadio que no se le da nada bien en los últimos tiempos y en el que podría ser testigo de cómo el Sevilla se supera a sí mismo y a unos registros que ya de por sí eran espectaculares.

No en vano, la primera vuelta acabó con el Sevilla en la segunda posición de la clasificación, merced a sólo tres derrotas y a 39 puntos que pulverizaron el récord del club a esas alturas del campeonato, donde el techo estaba en cinco puntos menos, los 34 logrados en la 2008/2009, con Manolo Jiménez en el banco.

Ahora, gracias a su mejor ritmo goleador en los últimos 60 años (48 tantos en 24 partidos), va lanzado y, desde la derrota en Granada en la jornada 14, sólo ha caído en Cornellà y suma 25 de los últimos 30 puntos.