Los compromisos internacionales han propiciado el primer parón liguero de la temporada y a su vez inaugura la primera concentración seria de partidos para los clubes inmersos en competiciones europeas, pues hasta la próxima interrupción de la competición, en los albores del mes de octubre, juegan dos encuentros por semana.
Es el caso por ejemplo del
Sevilla de Lopetegui, que, a partir del domingo, día que visita
Mendizorroza para enfrentarse en Liga con el Alavés, disputa un total de siete encuentros en 21 días, justo antes de que el campeonato regular vuelva a pararse por las convocatorias internacionales.
Así, los nervionenses afrontan cinco encuentros correspondientes a
LaLiga, dos de ellos de elevada exigencia contra el
Real Madrid y el Barcelona, y dos compromisos de la
Europa League, que arranca ya la próxima semana.
No en vano, la siguiente cita del Sevilla después de los babazorros será en
Azerbayán contra el
Qarabag, perteneciente a la primera jornada de la
Fase de Grupos del torneo fetiche de los hispalenses. Sólo tres días después, el domingo 22, los blanquirrojos reciben en el
Ramón Sánchez-Pizjuán al Real Madrid.
Será el reencuentro de Julen Lopetegui con su exequipo y el del
Sevilla con su gente tras cerca de un mes, pues no ejercía de local desde el partido contra el
Celta el 30 de agosto. Entre semana, el jueves, tocará Liga, con desplazamiento a
Ipurúa, para luego, el domingo 29 verse las caras en casa con la
Real.
Aún quedarán dos partidos por delante en este duro repecho, primero con el estreno europeo en Nervión ante el Apoel, ya en noviembre, el día 3, y luego la visita al 'dentista' con el encuentro en el
Camp Nou ante el Barcelona. Siete partidos de vital importancia para confirmar las buenas sensaciones y consolidarse en la parte alta y para dejar clara su teórica superioridad en el
Grupo A de la Europa League.