Su salida, en los últimos días del mercado, rumbo al PSG, pilló a casi todos por sorpresa. Incluso, de algún modo, a Sergio Rico, quien ha reconocido que ya se había hecho a la idea de seguir en el Sevilla esta temporada, aunque al ver pasar este tren no dudó en cogerlo.
“En el mundo del fútbol todo puede suceder muy rápidamente, en un instante. Llegó en el último momento y estoy muy feliz, satisfecho, con un gran deseo de disfrutar de la experiencia", señalaba en Radio Marca el jugador sevillano, que mañana vivirá desde el banquillo uno de los grandes duelos de la Champions League: PSG-Real Madrid.
"Sonó el teléfono y no lo pensamos dos veces. Al final del mercado, tuvimos la idea de quedarnos en el Sevilla. Pero ante tal oportunidad nadie puede negarse y decidimos aceptarlo”, confesaba. El de Montequinto sabía el rol que le esperaba en el Sevilla, a la sombra de Vaclik, y ha preferido ser el recambio de un Keylor Navas que también está recién llegado a París. Allí espera, al menos, sumar títulos en uno de los equipos más ricos del mundo.
Fernando Mateos1 min lectura