Pejiño irrumpió con tremenda fuerza en la pretemporada de la 18/19 a las órdenes de Machín con su descaro y su evidente calidad en ataque, suscitando su proyección muchas expectativas en sevillismo. Tanto es así que
su llamativa puesta en escena en la preparación le otorgó la oportunidad de estrenarse con el primer equipo en la previa de la Europa League y disputar hasta tres partidos, ante el Ujpest y el Zalguiris, dos de ellos como titular y sirviendo una asistencia.
No obstante,
luego no tuvo más recorrido en el Sevilla FC y su peso en el filial fue menos del esperado desde su su fulgurante aparición en la pretemporada. En total,
sus números en el SAT hasta su salida alcanzaron los 48 partidos, con cuatro tantos y tres asistencias.
Su etapa en Nervión terminó el pasado verano y puso
rumbo a Las Palmas en Segunda división, categoría en la que se estrenaba y
está dejando muestras de su talento y su olfato goleador. De hecho, el barbateño ya ha igualado en lo que va de temporada el número de goles marcados en el filial nervionense, pues este fin de semana
ha firmado un doblete que eleva su cuenta en el conjunto canario a cuatro dianas.
Pejiño le dio el triunfo a Las Palmas con dos tantos con los que remontó la diana del Fuenlabrada y confirma su importancia en los auriazules, que han celebrado su reaparición después de una lesión que lo tuvo apartado de los terrenos de juego 15 encuentros. Antes de la misma, ya había anotado una diana y servido dos asistencias, y después ha sumado tres goles.
Registros muy destacados, cuatro tantos y dos pases de gol, teniendo en cuenta que sólo ha podido jugar 14 partidos, lo que evidencia su elevado rendimiento y confirma las buenas sensaciones que en su momento dejó en el Sevilla, club del que no se olvida y al que mandó ánimos antes del derbi.
Álvaro Palomo2 min lectura