El
Betis Deportivo vuelve a cerrar la tabla del Grupo IV de Segunda B, tras perder esta jornada, con su empate casero y postrero ante el San Fernando, una nueva oportunidad de aferrarse a la esperanza de la salvación.
Errores propios aparte, muchos achacables a su bisoñez -
es el equipo con media de edad más baja de la categoría: 21,2 años-, el filial está pagando este curso, y con especial crudeza en esta recta final,
la deficiente planificación de un Lorenzo Serra Ferrer que sí lo está bordando en el primer equipo, tanto en sus movimientos estivales como en los invernales y en los que ha adelantado para la 18/19, pero que no ha hecho lo propio con la segunda escuadra, cuya gestión asumió plenamente.
La puntilla ha llegado en los últimos días, cuando el vicepresidente deportivo
descartó la llegada de un delantero que reforzara al mermado plantel de José Juan Romero -
ante el San Fernando sólo contaba con 13 jugadores, más cuatro juveniles- en los dos meses finales de competición. La lesión de larga duración del meta
Sergio Tienza, que se lastimó una rodilla de gravedad en la vuelta de los cuartos de final de la Copa RFEF, abría esa posibilidad extemporánea, solución de urgencia a las contingencias que han dejado 'tiritando' los puestos de ataque:
promoción de Loren (que se une a
Francis y Junior),
dolencias de Aitor y Liberto (que estarán K.O. seis semanas)...
Antes, como ya se ha apuntado, la secretaría técnica verdiblanca no cubrió las lagunas detectadas durante la pretemporada, cuando
se marcharon del Betis Deportivo puntales como el artillero
Juanma, el pivote
César de la Hoz, el mediapunta
Narváez o el extremo
Francis. En principio, los responsables de la planificación concluyeron que había que traer un guardameta, uno o dos centrales, un lateral derecho, un medio de cierre, un extremo y un delantero. Agosto se cerró con sólo tres altas: el zaguero
Nil Coch (séptimo futbolista menos utilizado del plantel a estas alturas), el cancerbero
Tienza (sólo 360’ antes de su lesión) y el atacante de banda
Liberto (15º en minutos, en gran parte por su fragilidad física). Ninguno ha llegado a los mil minutos en la Liga.
Las posiciones específicas de '2' y de '5' no sólo no se potenciaron, sino que siguieron huérfanas en enero, cuando Serra trajo a cuatro efectivos interesantes pero con una larga inactividad a sus espaldas. Por necesidad, el central
Carlos Blanco, el interior
Kaptoum y el (ya único) delantero
Uche están jugando, mientras que el mediocampista creativo
Josimar Quintero, el que peor forma de todos traía, apenas ha aparecido 50 minutos.
Por todo ello, José Juan
ha dado la alternativa ya a seis juveniles (Rober, noveno más usado, y Abreu son fijos; y Dani Rebollo, Meléndez, Jaime y Tellado probaron la miel), más otros tres (Álex, Luque y Diego Esteban) citados.
Hinojosa, los Julios, Redru, Pozo y Junior, las solucionesAnte la falta de refuerzos en dos posiciones tan específicas como la de lateral derecho -se quedó sólo con Juanjo Mateo- y mediocentro -huérfano tras la marcha de César de la Hoz-, José Juan tiró de imaginación y de la polivalencia de sus hombres. Así, contando sólo los que ejercieron de inicio, empleó diez veces a Julio Alonso y una a Redru a pierna cambiada en el costado diestro de la zaga, al tiempo que el central Pozo actuó ahí en media docena de ocasiones entre Liga y Copa RFEF. Para el puesto de '5', el míster gerenense se decantó preferiblemente por un Hinojosa con otro perfil (19 veces), pero también fueron mediocampistas de cierre Junior (1) y Julio Gracia (2) hasta que acabó promocionando Jaime Garijo.