Un 11 de junio de hace 16 años, en el ya desaparecido Vicente Calderón, el Betis tocaba la gloria con su último título de Copa del Rey tras un partido ante Osasuna (2-1) que convirtió a Dani en un héroe.
Fue la culminación a los, posiblemente, diez mejores años de la entidad. Pues, curiosamente, la efeméride coincide en fecha con otro triunfo histórico, ocurrido exactamente diez años antes (1995), una victoria del Betis de Serra Ferrer en el derbi sevillano que le daría la tercera plaza de aquel campeonato y le devolvería a Europa después de mucho tiempo. Tras esto vendrían otras cuatro clasificaciones europeas y el título copero en este lapso.
Para llegar a ese momento en el que Cañas levantó el trofeo, el Betis había tenido que eliminar al CD Alcalá, Cádiz, Mirandés, Gramanet y Athletic Club. En la final, Ricardo Oliveira abriría el marcador a quince minutos del final del encuentro, Osasuna empataría nueve más tarde y, en la prórroga, Dani haría el gol que le llevó a la gloria.