De 'supporter' del Betis a cura; la historia del padre Israel

El fútbol es pasión; sentimiento. De ahí que al padre Israel Risquet, cura en la Parroquia Sagrada Familia de Sevilla, no le haya resultado tan radical el cambio de la grada a la iglesia. Aficionado del Real Betis Balompié desde que nació, perteneció en su juventud al grupo ultra ‘Supporter’.

Comenzó a ir al Benito Villamarín con su familia, pero rápidamente le entró el gusanillo: “Mi tío Candi nos llevaba cuando éramos más pequeños a la Grada Alta, que había una peña antigua que se llamaba ‘El Chupe’. Dos años después bajamos con los Supporters porque la idea era animar todo el partido, que es lo bueno”, ha contado el padre Israel en Tiempo de Juego, de Cope.

El sacerdote es un bético que se alegra por el Sevilla FC, ya que no quiere “malos royos de ser antisevillista”. Al mismo tiempo que busca la ayuda divina para su Betis.

“Yo le digo al señor que tiene cosas más importantes, pero de vez en cuando le digo que el fútbol es fútbol, pero si puede ser, yo tiro para lo mío”, bromea.