Cuando se habla de que hay que aclarar muchas cosas antes de sellar un acuerdo de continuidad en el banquillo bético no significa que el técnico cántabro vaya a poner alguna traba, al contrario, como ha demostrado a lo largo de su trayectoria, no sólo es una persona de palabra, sino que todo lo que ha negociado ha sido para mejorar el equipo que entrenaba e intentar seguir creciendo, unos objetivos que concuerdan con los que tiene la cúpula verdiblanca.
Con Setién y Serra, avalados por Haro y Catalán, el Betis puede hacer un proyecto para muchos años y, a poco que todo se calme y la regularidad regrese a Heliópolis, la afición podrá volver a disfrutar como hizo al final de la temporada pasada. O como en el Camp Nou, para no irnos muy lejos. Hay futuro.