Las principales webs tecnológicas y de comunicación ya hablan de los cambios que, de manera progresiva pero inminente, aplicará Netflix en todo el mundo para combatir una pésima noticia para sus intereses. Y es que, por vez primera en toda su historia, la plataforma de streaming ha perdido suscriptores (200.000 en el primer trimestre de 2022), con perspectivas incluso peores en el siguiente, circunstancia que ha producido un desplome en Bolsa del valor de sus acciones, cercano al 25%, según 'Xataka.com'. A este respecto, la empresa estadounidense está barajando varias medidas para contener el problema, algunas de las cuales no van a hacer mucha gracia a sus usuarios.
De esta forma, Netflix, que ya subió el precio de sus planes recientemente, entiende que uno de los grandes problemas es la posibilidad de compartir sus cuentas de manera casi indefinida, burlando las limitaciones de la firma, incluso entre personas fuera del ámbito familiar. De hecho, las cuatro conexiones simultáneas que se permitían en la versión más cara del producto no se analizaban de manera exhaustiva, por lo que era habitual que una misma contraseña fuera utilizada por más de ese cuarteto permitido, accediendo desde otro terminal y simplemente usando en perfil que estuviera libre. En principio, la empresa hizo la vista gorda, pero se acabó.
"Es probable que el hecho de compartir haya contribuido a impulsar nuestro crecimiento, al conseguir que más personas utilicen Netflix y lo disfruten. Y siempre hemos tratado de facilitar el uso compartido dentro del hogar de un miembro, con funciones como los perfiles y las transmisiones múltiples. Aunque (estas opciones) han sido muy populares, han creado confusión sobre cuándo y cómo se puede compartir Netflix con otros hogares", asegura un alto cargo de la compañía californiana, que estima que unos 100 millones de hogares no están pagando lo que deberían por el servicio.
Ya se está probando en países como Chile, Costa Rica y Perú la posibilidad de añadir subcuentas a la principal (hasta dos) a un precio máximo de tres dólares al mes, ya que la idea es que, en 2023, no se puedan compartir de manera indiscriminada las contraseñas, un control que se intensificará a través de direcciones IP y otras fórmulas ya establecidas. La segunda medida para contener las pérdidas de Netflix será la creación de cuentas más baratas, seguramente no con acceso a todas las funciones, a cambio de introducir anuncios publicitarios, algo que hacen otras plataformas de streaming (todas las vinculadas a operadoras o canales en España, salvo que se contrate un servicio Premium: Movistar, Orange TV, MiTele, A3Player...; pero también Amazon Prime Video, por ejemplo).
Villa Gómez3 min lectura