José Antonio Rivero9 min lecturaLa historia cuenta que Arquímedes pronunció esta palabra tras descubrir cómo medir el volumen de un cuerpo irregular. Esto le permitió resolver el problema que el rey tirano Hierón II le formuló en relación con la pureza en oro de una corona. Este hallazgo lo realizó al sumergirse en la bañera y ver el agua que se derramaba. Tal fue su alegría que salió corriendo a las calles de Siracusa desnudo.
En la actualidad existen muchas, muchísimas competiciones de matemáticas que enfrentan desde alumnos de primaria hasta estudiantes de doctorado, siempre entre iguales, despertando la misma alegría que Arquímedes al obtener un resultado positivo, una experiencia gratificante.
Este año, la Asociación Nacional de Estudiantes de Matemáticas, en su objetivo de promover las matemáticas y unir al estudiantado de Matemáticas, ha organizado la primera edición de una competición que se asemeja a una Liga deportiva: la Liga Matemática.
Fue presentada e ideada por el estudiante de matemáticas burgalés en la Autónoma de Barcelona Nicolás Atanes, y presentada en el Encuentro Nacional de Estudiantes de Matemáticas de 2023, celebrado en julio de dicho año en Badajoz. Se organiza durante todo el curso, de septiembre a mayo, evitando exámenes y otras competiciones, porque matemáticas hay todo el año, pero con el mismo espíritu: resolver, eso sí, en equipo, 3 problemas de matemáticas en 90 minutos.
Al inicio se esbozó un calendario con los partidos previstos para cada Jornada, y cada semana, los equipos cuadraron entre sí, a través de los delegados (no jugadores) los horarios de la siguiente jornada, a lo cual se sumaba el esfuerzo de crear los documentos con los problemas y el buscar un árbitro.
Según la organización, se han jugado prácticamente todos los partidos. Ha sido casi imposible jugarlos todos, siempre ha habido incompatibilidades con los horarios de los dos equipos, y eso sumado al desconocimiento de las reglas, como que cualquier estudiante de la Universidad del equipo podría sumarse en cualquier momento al equipo, ha dificultado mucho.
Para el año que viene se aspira a oficializar equipos, y que las Universidades doten de una estructura a los equipos, para que éstos tengan más recursos, como un correo electrónico institucional de equipo, un espacio web, logos, camisetas de equipo, repercusión y apoyo entre el estudiantado... Es, lo que llaman, la teoría de equipos.
Los partidos son 3 problemas, duran 90 minutos, y en ellos entre 3 y 6 jugadores (con preferencia por 6) seleccionados por el delegado juegan para resolver 3 problemas de tipo Olimpiada, donde el sentido lógico, el ingenio y el conocimiento de matemáticas son clave. Durante el partido, las estrategias son de cada equipo: eso sí, cuando un equipo logra resolver un problema, debe anunciarlo al momento, como Arquímedes en Siracusa, y anunciarlo al árbitro, a la vez que se lo envía.
El efecto Eureka que promueve la Liga es único en todas las competiciones, y pone en tensión al rival y a espectadores. El árbitro debe empezar a corregirlo conforme lo recibe, y su corrección ha de ser total: nada de medias puntuaciones: o gol o error. Y la respuesta deben conocerla ambos equipos, sin matices del motivo de error.
A veces lleva más tiempo o menos corregirla, o incluso debe hacerse una corrección posterior al partido, que se refleja en Acta, pero usualmente ambos equipos saben en el momento. También tardan a veces en volver a mandar tras el error. Los equipos después pueden reclamar las respuestas del rival, pues en estos partidos la velocidad también influye: quien primero resuelve los 3 problemas cierra el marcador, evitando el 3-3. Si por ejemplo en un partido van un 2-1 y el primer equipo resuelve el problema restante, el resultado final provisional será un 3-1, da igual si en el tiempo restante el segundo equipo resuelve alguno de los otros dos problemas.
Los 31 equipos de las 29 Universidades que conforman la Liga Matemática 2023-2024, junto con sus delegados, son: Delta Chancla (Universidad de Oviedo, Álvaro Lerones), El margen del papel (Universidad de Málaga, Pepe Molina), Poblema FC (Universidad de Cantabria, Pablo Asiain Monreal), Dragones de Cantoblanco (Universidad Autónoma de Madrid, Nicolás Rey), EHUler (Universidad del País Vasco, Nerea Álvarez), Equipo Nebrija (Universidad de Nebrija, David Martín de Diego), Badahoes (Universidad de Extremadura, Paula Sáenz de Tejada), Hamiltogatos (Universidad de Sevilla, Alejandro Costa), GalUALs (Universidad de Almería, Javier Canton), Ni sí ninot (Universidad de Valencia, Marina Benito), GaUS (Universidad de Sevilla, Luis Gonzalo), LUGRange (Universidad de Granada, Javier Carvajal Noguera), URracas del Ebro (Universidad de La Rioja, Víctor Alcalde), Funtor de Breogán (Universidad de Santiago de Compostela, Javier Polo), SUMUtorios (Universidad de Murcia, Juan Agustín Lorca García), Eulerianos (Universidad Politécnica de Valencia, Adrián Toledo), MatUCAs (Universidad de Cádiz, José María García Pérez), Epsiloneta (Universidad de las Islas Baleares, Frank Hammond), ¿Nombre?, ¿Qué nombre? (Universidad Politécnica de Madrid, Noé Rico), Matemágicos (Universidad Pública de Navarra, María Virto), UPCerdős (Universidad Politécnica de Cataluña, Leonardo Costa), Los transfinitos de Ali-Cantor (Universidad de Alicante, Javier Aldeguer), DerUVAda (Universidad de Valladolid, Javier Gómez de Tejada), Una hora menos (Universidad de La Laguna, Pablo Becerra), Las Bolas Compactas (Universidad Nacional de Educación a Distancia, Daniel García Iglesias), Parábolas mis dos hipérbolas (Universidad de Salamanca, Andreu Simó Vidal), Proposición indecente (Universidad de Zaragoza, Marcos Escartín Ferrer), GaUB (Universidad de Barcelona, Robin Ath), Complutense Universidad de Madrid (Universidad Complutense de Madrid, Alberto García), Los hijos de Gauss (Universidad Complutense de Madrid, Jorge del Saz), Gatois (Universidad Autónoma de Barcelona, Oriol Bosquet).
Dentro de la teoría de equipos se espera que los nombres de equipos se mantengan, aunque quizá también será necesario que cada Universidad tenga un único equipo. Casi 500 estudiantes han pasado por la primera edición de la Liga, que espera ir en aumento con las mejoras de cara a la siguiente edición.
Esta Liga, como no podía ser de otra manera, ha contado con el apoyo de la comunidad matemática. Varios ex-olímpicos de la Internacional de Matemáticas, tales como Álvaro Gamboa, Martín Padrón, Álvaro Acítores, Leonardo Costa, Jorge Casanova, entre otros, también son jugadores de la Liga Matemática. El Boletín de la Real Sociedad Matemática Española publicaba cada semana los resultados de la Liga así como las noticias más destacadas, y recientemente se organizó un partido en el marco de la Conferencia de Decanos de Matemáticas.
Además, dado que la mayoría de jugadores eran estudiantes de Grado, los árbitros, delegados y problemas venían directamente de alumnos de máster, doctorado o incluso profesorado directamente del ámbito de las Matemáticas. La Liga ha permitido darle emoción a las matemáticas, tejer una red de entusiastas de las matemáticas, y poner en relieve la actividad de iniciativa que realizan los estudiantes de matemáticas. Los jugadores compiten, pero también divulgan las matemáticas y participan en actividades para tal fin.