Qué es la tanorexia, la adicción que sufren los más jóvenes
Con la llegada del verano se aumenta la probabilidad de esta adicción que sufren personas obsesionadas con el bronceado

El verano es una de las épocas más esperadas del año para buena parte de la población. Se trata del momento en el que muchas personas pueden lucir su bronceado, ese que llevan tratando de conseguir durante todo el año. Pero precisamente eso puede llegar a ser una obsesión que genera muchos problemas de salud. Y es que parece que ahora todo el mundo, hasta el que tiene el tono de piel más blanco, cuando llega esta época, tiene que tener algo de moreno. Ahora la palidez se relaciona con cuestiones negativas como estar encerrado en casa o directamente con enfermedades o malestares físicos.
Lo que muchas personas no saben es que realmente tiene peores consecuencias un bronceado excesivo que una piel pálida. De hecho, obsesionarse con el bronceado, con tener un tono de piel oscuro de manera natural o artificial, es una enfermedad llamada tanorexia. Se trata de una de las cuestiones que más influyen en los cánones de belleza actuales y que en muchas ocasiones se considera muy atractivo, especialmente en los hombres. Ya se conoce que esto puede generar incluso cáncer de piel si no se trata con precaución, pero la obsesión tiene también otro tipo de consecuencias.
La presión social como causante
Realmente se trata de un problema que, como se ha comentado, está bastante relacionado con la sociedad y con los cánones de belleza, en los que actualmente entran los tonos de piel morenos. La cuestión es que también para muchas personas el bronceado tiene un efecto psicológico porque otorga relajación y mejora de ánimo gracias a la liberación de endorfinas, que es muy semejante a lo que ocurre cuando se hace deporte. Se trata por tanto de una patología psicológica que se puede equiparar con la compra compulsiva o con el alcoholismo.
Pero realmente tiene más que ver, como su propio nombre refleja, con otro tipo de patologías como la anorexia. Y es que pare alguien que padezca tanorexia, nunca se va a ver lo suficientemente moreno, siempre va a creer que está más blanca de lo que realmente está. Las consecuencias de esto lógicamente están relacionadas con la posibilidad de sufrir importantes quemaduras e incluso puede llegar a provocar cáncer de piel. Sobre todo porque se extiende durante todo el año, es decir, la persona tiene la necesidad de verse morena todo el año y eso le lleva a exponerse de manera descontrolada bien al sol o bien a métodos artificiales como las cabinas de rayos.