El CTA apoya la no expulsión de Vivian ante el Elche: "No puede considerarse una carga legal"
El central del Athletic Club protagonizó la jugada más polémica del choque frente al Elche y pudo acabar expulsado por mano pero el colegiado acabó decretando falta previa de André Silva
El Comité Técnico de Árbitros (CTA) ha analizado como es costumbre cada semana las jugadas que han dado más de que hablar de la última jornada liguera y entre ellas está la de la no expulsión de Dani Vivian en el Elche - Athletic Club. El colegiado del encuentro, José Luis Guzmán, fue avisado por el VAR para que revisara en la pantalla la posible expulsión por cartulina roja directa de Dani Vivian tras cortar un ataque del Elche con la mano.
Sin embargo, el árbitro del choque tras revisar la jugada en el monitor, decidió mantener su decisión sobre el campo y no expulsar a Dani Vivian al entender que su mano venía precedida de un empujón de André Silva en el forcejeo por ganar la posesión de balón, por lo que acabó decretando falta del delantero portugués del Elche.
La decisión, evidentemente, no dejó nada satisfecha al respetable ni al equipo local, pero el Comité Técnico de Árbitros se ha encargado de explicar detalladamente la decisión del colegiado. "En esta acción, el árbitro aprecia una falta del atacante al producirse un contacto que resulta suficiente para desestabilizar al defensor justo en el momento en el que éste se dispone a disputar el balón. Ese desequilibrio impide al defensor intervenir con todas las garantías para poder despejar, alterando así el desarrollo natural de la jugada", explican desde el CTA.
La clave de la jugada, "una carga no legal"
"Es importante destacar que no puede considerarse una carga legal porque el balón no está en disputa para el atacante. Por tanto, el contacto se interpreta como una acción imprudente que limita la capacidad del defensor para jugar el balón con normalidad", añaden en sus explicaciones para aclarar finalmente que puede tratarse "de una mano punible", de ahí la llamada desde el VAR a José Luis Guzmán: "Tras este contacto inicial, el balón impacta en la mano del defensor, tratándose de una mano punible. EL VAR interviene al tratarse de una posible infracción Dogso (ocasión manifiesta de gol), advirtiéndole de una posible falta previa y recomienda revisión. El árbitro tras ver la jugada mantiene su decisión de no señalar la falta por mano considerando que la falta previa del atacante condiciona la acción".
Por último, aclaran que la decisión del colegiado a pie de campo es correcta tras ver la acción repetida: "En definitiva, se trata de una jugada de interpretación donde el árbitro valora que el contacto del atacante afecta directamente a la posibilidad del defensor de disputar el balón".