Tensión en el FC Barcelona: Laporta aprieta a su Junta

El FC Barcelona atraviesa días de máxima tensión en los despachos. La situación económica del club, lejos de estabilizarse, se complica y obliga a la directiva presidida por Joan Laporta a tomar decisiones urgentes. Según ha publicado Marca, el mandatario azulgrana ha pedido a varios miembros de su Junta Directiva que aporten un aval económico con el fin de cuadrar el Fair Play Financiero y recuperar la regla 1:1 en LaLiga.

El origen del problema radica en que el club ha superado los límites de gasto en las secciones deportivas, una desviación que condiciona seriamente la capacidad para inscribir nuevos jugadores. LaLiga exige que se cumplan los parámetros establecidos para autorizar cualquier alta en la plantilla, y en estos momentos el Barça no dispone del margen necesario.

Este movimiento llega en un contexto en el que el club espera dos autorizaciones clave de parte de la patronal. La primera, la aprobación del informe médico de Marc-André ter Stegen, quien fue operado de la espalda el pasado 29 de julio. Si LaLiga certifica que su baja es de larga duración, más de cuatro meses, el club podría liberar parte de su salario y utilizar ese margen para inscribir al portero Joan García.

La segunda autorización pendiente es la relativa a los nuevos palcos VIP del Camp Nou. El Barça confía en que su explotación genere ingresos inmediatos que permitan equilibrar las cuentas y regresar a la ansiada regla 1:1, requisito imprescindible para que las incorporaciones puedan registrarse sin necesidad de complejas operaciones financieras.

El aval que solicita Laporta a sus directivos no es un procedimiento habitual, pero en la actual coyuntura se percibe como una medida de urgencia. Esta garantía económica serviría para cubrir el exceso de gasto y ofrecer a LaLiga la tranquilidad necesaria para desbloquear las inscripciones. Sin embargo, este tipo de exigencias pueden generar tensiones internas, ya que no todos los miembros de la Junta estarían dispuestos a asumir riesgos personales por el estado financiero del club.

En paralelo, el Barça sigue maniobrando para reforzar la plantilla antes del cierre del mercado. La prioridad inmediata es Joan García, pero el regreso a la regla 1:1 abriría la puerta a más inscripciones como la de Marcus Rashford. Mientras tanto, el tiempo corre y en el Camp Nou son conscientes de que cualquier retraso en las resoluciones de LaLiga podría complicar todavía más la planificación deportiva. Laporta afronta así un pulso doble para convencer a su Junta para aportar el aval y lograr que LaLiga apruebe cuanto antes las operaciones pendientes.