Ronald Araujo, señalado

El Fútbol Club Barcelona puso fin al sueño del triplete. El Inter de Milán se impuso por cuatro a tres en un encuentro que fue un auténtico espectáculo futbolístico. Los culés firmaron una primera parte muy por debajo del nivel al que vienen rindiendo esta temporada. De ahí que los italianos se marcharan al descanso con un dos a cero en el electrónico del Giuseppe Meazza. En el segundo tiempo, el Barça volvió en sí.

Los hombres de Hansi Flick empezaron a elevar el nivel nada más salir de los vestuarios. Pronto comenzaron a asfixiar a los italianos y lograron darle la vuelta al marcador. Eso no quedaría ahí, pues los interistas hicieron el tercer tanto en los últimos compases del choque y forzaron que el encuentro se marchara a la prórroga, donde ya finalmente los locales se hicieron con el pase a la final de la Champions League.

En el minuto 76 de partido, con los azulgranas por delante ya en el marcador, Hansi Flick decidió retirar del terreno de juego a Íñigo Martínez, que tenía cartulina. En su puesto dio entrada a Ronald Araujo. Flick recompuso el centro de la zaga; Cubarsí pasaba al perfil izquierdo y Araujo se establecía en el derecho. En los laterales permanecía Eric García y Gerard Martín, que firmó un gran partido.

Araujo, protagonista negativo

Con la entrada del charrúa, el Barça comenzó a sufrir más embestidas del Inter, que no estaba dispuesto a entregar la cuchara así de fácil. Menos, en un Giuseppe Meazza abarrotado. Casualidad o no, los culés sufrieron más desde ese punto. En el gol de Acerbi que manda el encuentro a la prórroga, Araujo sale señalado. El central italiano le remata con demasiada facilidad dentro del área pequeña, mientras el uruguayo lo sostenía levemente por la cintura, sin hacer el intento de tapar el tiro ni siquiera en ningún momento.

Ya en la prórroga, lleva el definitivo cuatro a tres para los milaneses. En esta ocasión era Fratessi quien aprovechaba un balón suelto en el área para batir a Szczesny. Esa jugada del gol proviene de otra acción en la que Ronald Araujo está muy blanco, casi inexistente su defensa a Thuram, que logró poner un centro cómodamente. Ante estos dos errores del uruguayo, muchos culés comenzaron a recordar en las redes sociales otros errores del central del Barcelona que costaron caro previamente, como ante el PSG en la edición pasada de la Champions.

El enfado de un sector de la parroquia culé ha cruzado una línea que nunca debió cruzarse, y es la del insulto. La cosa ha llegado hasta tal punto que el jugador ha tenido que limitar los comentarios de su última publicación por el aluvión de insultos y acoso que estaba recibiendo. Algunos de los comentarios que se pueden leer dicen cosas realmente feas, como "siempre apareces en los momentos importantes... Pero para joder todo".