Antonio José Medina3 min lecturaLa aparición inesperada del París Saint-Germain en el horizonte de Fabián Ruiz ha cambiado todo el panorama de su futuro. Tras un verano con poco movimiento y cuando casi parecía más que acabaría ampliando un año su estancia en Nápoles ante la falta de ofertas de clubes de primer nivel que estuvieran dispuestos a llegar a lo que su club pedía, el PSG ha colmado las expectativas.
En tan sólo dos días se ha avanzado más que muchos fichajes que llevan meses negociándose y aunque no hay acuerdo -de hecho, aún no se ha rechazado oficialmente la primera oferta-, tanto desde Francia como en Italia aseguran que podría zanjarse todo en 24 horas y hacerse oficial a lo largo de esta misma semana.
Las diferencias están tan sólo en tres millones. El PSG ha ofrecido 25 millones de euros, incluidas las variables, mientras que el Nápoles está pidiendo 28 kilos, dos menos que lo que en principio quería. Las diferencias no son tan grandes, porque el equipo partenopeo aceptaría que éstas también se ajustaran con variables. Desde Francia avisan que el PSG va a aumentar la oferta en un millón, con el que espera cerrar el acuerdo.
Lo que sí los separa en estos momentos es cómo aplicar esas bonifiaciones. El Nápoles las quiere asociar a objetivos globales, como clasificaciones para la Champions o títulos, que serían fáciles de cumplir en el equipo galo; y el PSG al número de partidos, lo que indicaría que, en caso de tener que pagarlas, sería porque Fabián es importante en el equipo de Christophe Galtier.
L'Équipe ya informó ayer que el PSG y Fabián han llegado a un acuerdo para los términos del contrato y que el ex del Real Betis firmaría por cinco años con el club de la capital de Francia.
De la cifra total, el Real Betis sólo se llevaría un 4,5% por derechos de formación, en torno a un millón de euros que, además, computaría a partir del año próximo, por lo que tampoco le solucionaría nada la situación de límite de gasto que ahora mismo atraviesa.
Sí se la arreglaría a un Fabián que verá cómo su sueldo se multiplica casi por tres veces. El centrocampista palaciego pasará de cobrar 1,8 millones de euros en el Nápoles a 5 kilos en el París Saint-Germain.
El exbético se convertiría en el quinto fichaje del PSG tras Vitinha, Ekitike, Mukiele y Renato Sanches. Jugadores de un perfil mucho más bajo que los que el club parisino fichó el pasado año, pero acordes a la forma de gestión de su nuevo técnico y a la forma de pensar de su consejero deportivo, el portugués Luis Campos.