Marco Garcés aclara el papel de Jorge Mendes en el Celta

El Celta tuvo un mercado de fichajes muy complicado, con muchos altos y bajos. En la dirección deportiva celeste se trabajó con cautela y los fichajes fueron llegando a Vigo con el paso de los días, aunque no se pudieron completar todos los deseos del entrenador. Marco Garcés ha aclarado en una entrevista para el diario AS todas las cuestiones que rodearon al conjunto olívico en los meses de verano, la continuidad y su relación con Claudio Giráldez, las operaciones que se cayeron, la influencia de Jorge Mendes y su propia renovación.

El director deportivo repasó la venta de Fer López, representado por el portugués: "Se dio en junio, cuando todavía te entra en el presupuesto del año anterior. Su agente trajo una oferta, que era buena para el jugador y para nosotros y nos decidimos a aceptar. Cada uno tiene su versión de las cosas y puede contar la historia cómo la vivió, pero la oferta fue traída de su lado", explicó el mexicano, que quiso incidir en que el Celta no tiene ningún tipo de relación con Mendes y que no le preocupa que represente a más canteranos: "Nosotros no tenemos una relación con Mendes. Los jugadores escogen al representante, nosotros no los escogemos. Si Fer López decide firmar con Mendes o Gabri Veiga, con Pini Zahavi, es una decisión de ellos. No es, ni lejanamente, el agente que más jugadores tiene en la cantera".

Los fichajes que no llegaron al Celta

Respecto a las operaciones que se pudieron concretar, Garcés aclaró los casos de Azpilicueta, Brais Méndez y Denis Suárez: "Teníamos otras prioridades. Es un jugador que nos hubiera venido muy bien, que se podría acoplar muy bien al estilo de Claudio, pero al final tienes un límite de fichas y un límite salarial, tienes que acomodar las piezas donde entran", aclaraba respecto al central firmado por el Sevilla finalmente. Brais "fue más un sueño" y por Denis "nunca hubo una oferta".

Relación con Giráldez y su renovación

Por último, quiso despejar dudas sobre su relación con Giráldez y la famosa guinda del pastel que nunca llegó: "Era un mensaje a la afición de que nosotros buscamos generar una plantilla competitiva y que para eso incluso sacrificamos ofertas económicas importantes. Mi relación es bastante buena. Obviamente, siempre habrá fricciones. Desde la primera vez le dije, tú tienes que vigilar el corto plazo y yo, el largo. Eso va a traer algunos conflictos, pero tenemos que resolverlos como caballeros y siempre lo hemos logrado", explicó el director deportivo que espera renovar y seguir en el Celta muchos años: "Estoy muy bien aquí y ya hemos comenzado a hablar con Marián. Lo mío es muy fácil. Creo que hemos armado un grupo de trabajo bastante competente y profesional. A mí me gustaría estar mucho tiempo aquí, pero una cosa es lo que me guste y otra la realidad".