Sara Portillo Maya4 min lecturaAtlético de Madrid y Sevilla FC protagonizaron un duelo de ritmo frenético en el Cívitas Metropolitano y no es para menos. Estaba en juego el pase a semifinales de Copa del Rey, una competición en la que el conjunto de Quique Sánchez Flores guardaba especial ilusión dada la temporada tan complica que atraviesa en liga. También el cuadro entrenado por Diego Pablo Simeone quiere hacer historia en un año en el que aún tienen opciones a todo, aunque estén más desenganchados del liderato en la competición de LaLiga EA Sports. Finalmente, el duelo terminó con un 1-0 en el marcador, que le dio el pase a semifinales al Atlético de Madrid, y con polémica
Dos equipos que se conocen muy bien, así como sus propios entrenadores, que ya habían hablado al respecto en la rueda de prensa previa al choque de cuartos de final de Copa del Rey. "El siguiente capítulo es un partido muy emocionante. En un estadio muy complicado, con un rival que está muy crecido, y que está en un gran momento. Nosotros, como sevillistas, con la experiencia que tiene este equipo, con la historia que tiene en sus espaldas, nos tiene que ayudar para ir a un escenario tan importante y tan exigente como va a ser", decía el entrenador del Sevilla FC. "El mejor partido lo hicieron en Getafe, en Granada jugaron bien... Está en un momento de necesidad, como nosotros con las nuestras. Tienen grandes futbolistas y un gran entrenador que nos conoce", indicó por su parte Diego Pablo Simeone.
La polémica arbitral se ha hecho notar nuevamente y el VAR ha vuelto a ser protagonista. Concretamente con dos situaciones en las que el colegiado ha tomado decisiones diferentes que se han dado en las dos áreas y otra en la que sí había señalado pena máxima, pero cambió de opinión tras recibir la llamada desde la Sala VOR.
La primera de ellas tuvo lugar en el minuto 24 de partido, cuando Gil Manzano indicó falta de Marcao sobre Nahuel Molina. Así, desde los once metros Antoine Griezmann, máximo anotador histórico del Atlético de Madrid, amenazaba con abrir el luminoso de la noche. Sin embargo, el futbolista francés terminó tropezando y mandando el esférico a las nubes, para alivio de los visitantes.
Más adelante, hacia el minuto 46 de partido, el conjunto sevillista pidió una falta cometida por Nahuel Molina sobre el sevillista Sow dentro del área defendida por Oblak. En esa ocasión, el colegiado no estimó falta alguna y el encuentro siguió su curso. En la repetición sí que se aprecia tal contacto de Molina sobre el futbolista del Sevilla FC. Una acción por la que los visitantes pidieron penalti pero que, a diferencia de la anterior, no fue concedido, cuando el luminoso aún iba 0-0 en el Cívitas Metropolitano.
Ya en el descuento, parecía haber penalti de Pablo Barrios sobre Lamela. Se formó una tangana sobre el terreno de juego. Parecía que en un primer momento el colegiado iba a señalar la pena máxima. No obstante, Hernández Hernández mandó a Gil Manzano al monitor del VAR. Tras eso tomó la decisión de no señalar el penalti, en el minuto 95 con el 1-0 en el marcador.