"Si hablo hoy, habrá fuego"

El Liverpool no se encuentra en su mejor momento. El conjunto ‘red’, que cayó eliminado de Europa de forma contundente ante la Atalanta en su propio estadio, ha dado un inesperado y sorprendente paso atrás en todas las competiciones. A pocas semanas de que Jürgen Klopp, quien conquistó la última Champions de la entidad de Anfield, certifique su salida, parece que las cosas van de mal en peor para el conjunto inglés, que necesita de un ‘electroshock’ para no perder más puntos en la Premier League.

La discusión entre dos símbolos del Liverpool

El último capítulo en la crisis del cuadro ‘red’ se produjo este mismo sábado, durante el encuentro que disputaron ante el West Ham y que terminó en empate. Durante la contienda, se apreció cómo Mohamed Salah, una de las grandes estrellas del equipo, y el propio técnico estuvieron discutiendo sobre la banda del London Stadium. Todo ello, después de que el egipcio fuera suplente ante el conjunto de los ‘hammers’, que fueron capaces de dar la sorpresa.

Salah, que no se encuentra en su mejor momento de forma, entró en el tramo final del encuentro y su suplencia no le debió hacer mucha gracia. Por ello, se acercó en un momento dado adonde se encontraba su entrenador para que este le realizara un comentario. A la vista de lo sucedido, lo observado por Klopp no fue recibido de buenas formas por el punta, que se mostró muy enfadado. Las imágenes le muestran realizando numerosos aspavientos e incluso gritarle al técnico, que no quiso echar más leña al fuego.

Las reacciones posteriores al choque evidencian cierta tensión en el Liverpool

Cuando finalizó el encuentro en la capital británica, si algo quedó claro es que la relación entre Salah y Klopp no atraviesa su mejor momento. El futbolista, que fue interpelado acerca de lo sucedido sobre el terreno de juego, dejó una respuesta que no dejará a nadie indiferente en la ciudad de The Beatles. “Si hablo hoy, habrá fuego”, expresó un atacante que quiso dejar claro su enfado con el preparador germano.

Tras la contundente afirmación de Salah, todos querían conocer las impresiones del ex del Borussia Dortmund. En su caso, el campeón de Europa quiso bajar las pulsaciones y no entró a valorar las declaraciones del que es todavía su jugador y una de sus grandes referencias en ataque. “No compartiré lo que se dijo. Ya hablamos y para mí ya está resuelto” expresó un Klopp, quien más allá de los resultados, debe enfrentarse a una pequeña crisis en el vestuario de un Liverpool que debe remontar el vuelo.