José Antonio Rivero3 min lecturaTodo argentino recordará para siempre el último mes, más aún si se trata de Lionel Messi. La estrella y capitán de la Albiceleste está en Rosario, su ciudad natal, para descansar y pasar las vacaciones de Navidad antes de volver a París y afrontar lo que le resta de temporada.
Messi, al igual que todo el equipo argentino, se dio un verdadero baño de masas por las calles de Buenos Aires, para luego partir cada jugador a su ciudad natal. El del PSG aterrizó en Rosario junto a Paulo Dybala y Ángel Di María, aunque Dybala fue desde ahí hasta Córdoba para encontrarse con su familia.
El astro argentino reunió a todos en casa. Desde sus padres, Jorge y Celia, hasta su pareja e hijos, aunque tendrá más visita en Rosario durante las vacaciones. El delantero uruguayo Luis Suárez, con quien Messi compartió vestuario en el FC Barcelona, viajó a Rosario junto a su familia para pasar las vacaciones con los Messi.
La llegada del uruguayo, íntimo amigo de Messi, a Rosario se debería a que el argentino, debido a la conquista del Mundial, querría realizar una celebración con sus más allegados y en su casa y ciudad natal.
"Primero que nada, un saludo grande para todos los rosarinos y felicitarlos por ser campeón del mundo y que estén disfrutando de este hermoso momento, un abrazo grande a todos", dijo el uruguayo en un video difundido por el Aeropuerto.
El aeropuerto está a solo 8 kilómetros de Kentucky Club de Campo, el exclusivo barrio cerrado en el que residen 'La Pulga', su mujer, Antonela Roccuzzo, y sus tres hijos cuando están en la ciudad.
Según medios argentinos, Andrés Iniesta también estaría invitado a dicho festejo y llegaría próximamente a la ciudad argentina.
Entrar al Kentucky Club de Campo es seguramente, en este momento, el mayor deseo de los millones de seguidores que Leo Messi tiene en el planeta. En ese exclusivo barrio privado a las afueras de su Rosario natal, al que ha accedido 'EFE', es donde el astro descansa con su familia, en medio de gran hermetismo, tras ganar el Mundial.
Un enorme "Gracias, Lío" luce en la entrada y una pantalla en la que rotan en bucle las imágenes de Messi levantando el preciado trofeo dan la bienvenida a los constantes coches que, autorización mediante, entran y salen del club, ubicado en Funes, localidad a unos 20 minutos en auto del centro de Rosario.
Ya dentro, 240 hectáreas, de las cuales solo 90 son urbanizables, en las que hay 500 viviendas, de diferente diseño cada una, además de campos de golf, de tenis y de fútbol.