Las mejores imágenes del triunfo del Málaga ante la Ponferradina

Triunfo muy valioso para el cuadro de Pepe Mel ante la SD Ponferradina. Un gol de Erik Morán en propia puerta le daba la victoria al Málaga CF en casa ante su afición en un encuentro que definió el técnico local en la previa como “una final”.

Apostaba Pepe Mel por un once conformado por Rubén Yáñez en la portería, una línea de cuatro atrás con Juanfran, Burgos, Juande y Lumor, un doble pivote conformado por Escassi y Febas, tres mediapuntas con Haitam, Cristian y Villalba y en la delantera regresaba Rubén Castro. Por su parte, el once de la SD Ponferradina era el siguiente: Makaridze, Adot, Pascanu, Adrián Diéguez, Ale Díez, Nwakali, Erik Morán, Ojeda, Agus Medina, José Naranju y Edu Espiau.

En la previa del choque, Pepe Mel fue preguntado por la posible titularidad de Rubén Castro, suplente en el último choque, y respondía que: “Es muy importante para nosotros. Quizá el error está siendo mío, de no darle las facilidades para que él haga lo que mejor sabe. Tenemos que sacar lo mejor de él y eso lo tenemos que hacer mandando balones a donde él juega. Los equipos de David te hacen los partidos espesos y no nos lo van a poner fácil”.

Otra de las novedades era la presencia de Haitam, sobre la que el técnico había comentado en la previa que “es un buen futbolista que tuvo la mala suerte de lesionarse cuando llegué yo y ha tenido un proceso de mes y medio fuera. Pero nos hubiera solucionado diferentes problemas que hemos tenido en esas posiciones. No se le ha usado más por eso. Pero nos tiene que dar muchas cosas. Ya empezó a dárnoslas en Zaragoza en un partido muy complicado, le hizo una jugada brillante. Confianza total en él como en Cristian, en Dani Lorenzo, a Andrés Caro y Moussa cuando esté…”.

Un partido en el que el Málaga se jugaba mucho, y es por ello que Pepe Mel quería que hubiera un gran ambiente: “El público está expectante. Ha visto una reacción, hay que verlo así. Hemos saldado dos partidos muy importantes para nosotros. Está a ver qué le propone el equipo mañana, qué ven, qué sienten. El público es inteligente y entendido, y sabe que la nuca forma de salir de esta situación es que los 11 que llevan la camiseta hagan las cosas bien. Cuando acaben los 90 minutos tendrán la oportunidad de expresarse como quieran”.