Luis Orejuela, la nueva perla del Mallorca que gana peso en los planes de Arrasate
El lateral izquierdo, máximo goleador del Juvenil A, completa la semana de trabajo con el primer equipo ante las ausencias en el flanco izquierdo

El Mallorca ha abierto la semana con un refuerzo inesperado para su primera plantilla. Luis Orejuela de la Rosa, lateral izquierdo del Juvenil A y una de las irrupciones más destacadas del fútbol base del club, se ha ejercitado a las órdenes de Jagoba Arrasate ante la falta de efectivos en su posición. La baja por lesión de Toni Lato y la convocatoria internacional de Johan Mojica han dejado un hueco que el técnico ha cubierto con un jugador que acumula nueve temporadas en la cantera y que figura como máximo anotador de su equipo en División de Honor con cuatro goles.
Compañero habitual en la dinámica formativa del club y asentado desde hace años en la estructura base, Orejuela afronta una semana diferente: la intención del cuerpo técnico es que complete todas las sesiones con el primer equipo mientras no regresen Lato y Mojica. Es un salto que reconoce la progresión de un futbolista que ya había trabajado puntualmente bajo las órdenes de Arrasate en situaciones de necesidad en el costado izquierdo.

La cantera entra en escena en el Mallorca
El tramo actual de la temporada ha obligado al Mallorca a mirar hacia dentro. El equipo ha logrado salir de la zona de descenso en las últimas jornadas, pero las lesiones y los compromisos internacionales han obligado a completar la plantilla con jugadores del filial y del Juvenil A. Nil Torreguitart es uno de los casos más habituales: el portero del Mallorca B ha trabajado con regularidad con el primer equipo y su presencia ha aumentado tras la lesión de Leo Román.
El ejemplo más reciente en competición ha sido el del central Javier Olaizola, que debutó en la Copa del Rey frente al Atlètic Sant Just. También se mantiene como alternativa Salhi, internacional con las inferiores de Francia, que realizó la pretemporada con el primer equipo y puede actuar como interior, lateral izquierdo o extremo. Con este escenario, Arrasate ha recurrido a perfiles versátiles y a jugadores que conocen la estructura del club y su metodología.

Orejuela aprovecha la oportunidad de Arrasate
El nombre propio de la semana es Orejuela. Es un jugador que ha ido consolidando su crecimiento desde que llegó al club en categoría alevín procedente de la Penya Arrabal. Con el paso de los años ha destacado en distintas etapas del fútbol base mallorquinista hasta convertirse en una pieza importante del Juvenil A, tanto por su capacidad ofensiva como por su presencia en campo propio. Su velocidad, llegada al área y fiabilidad en tareas defensivas han sido elementos que han llamado la atención del cuerpo técnico.
Arrasate ya lo había tenido en entrenamientos previos cuando surgieron ausencias en la banda izquierda, pero esta vez el contexto favorece una presencia continuada en la dinámica profesional. La valoración del técnico es positiva y su progresión reciente refuerza la sensación de que puede ser una alternativa más a medio plazo. No es solo una cuestión de necesidad coyuntural: el lateral ha mostrado evolución constante y un perfil que encaja con la idea de juego del primer equipo.

Una apuesta que se consolida en el Mallorca
La utilización de la cantera en momentos clave se ha convertido en un recurso natural dentro del club. Con retos en juego y con la obligación de sumar puntos para asentarse lejos del descenso, Arrasate ha encontrado en el fútbol base un refuerzo útil y ajustado a las circunstancias. Orejuela se suma ahora a ese grupo de jóvenes que han dado un paso adelante en un momento delicado para la plantilla, demostrando que el trabajo de formación sigue siendo uno de los pilares del proyecto.
La semana de entrenamientos permitirá medir cómo asimila el lateral el ritmo del primer equipo y si su evolución se mantiene en línea ascendente. Con un flanco izquierdo condicionado por las ausencias, su actuación puede abrirle nuevas puertas en un futuro próximo, reforzando tanto su crecimiento como la confianza del cuerpo técnico en los jugadores formados en casa.