De la Fuente, ambicioso, piensa ya en la Finalissima: "Queda mucho por hacer"

La selección española certificó de forma matemática en La Cartuja su pase al Mundial 2026, que en realidad era ya virtual desde el triunfo del pasado viernes ante Georgia. Lo hizo cediendo sus primeros puntos de la fase de clasificación ante Turquía, que fue capaz de llevarse un 2-2 para acabar el grupo en la segunda plaza y con ello en la repesca. Pero, pese al empate, la satisfacción era total en el seno de un combinado nacional que ha igualado el récord de partidos oficiales sin perder por parte de una selección, alcanzando los 31 que estuvo invicta la Italia de Mancini entre 2018 y 2021.

Tras el encuentro, Luis de de la Fuente mostraba su felicidad y pensaba ya en la próxima ventana internacional, con la esperada Finalissima ante Argentina que tendrá lugar el 27 de marzo de 2026 ante Argentina, con otro título en juego. "Queda mucho hasta marzo, tenemos muchísima ilusión pero hay mucho trabajo por hacer y tiempo para pensar muchas cosas. Esperemos contar con todos los futbolistas para llevar a los mejores jugadores que tenemos en España e intentar competir para ganar esta competición", señaló al respecto el riojano.

Las selecciones del bombo 1

Pero antes, el combinado nacional conocerá a su rival en el Mundial el próximo 5 de diciembre, fecha prevista para el sorteo que se celebrará en Washington, en el que España partirá en el bombo 1 junto a los tres anfitriones (Estados Unidos, México y Canadá) y el resto de favoritas, no pudiendo enfrentarse por tanto tampoco en la primera fase a Argentina, Francia, Brasil, Portugal, Alemania, Inglaterra, Países Bajos y Bélgica.

El enfado de De la Fuente

En cuanto al partido ante Turquía, una de las imágenes curiosas llegó a la conclusión del mismo, cuando De la Fuente mostró su enfado y le negó el saludo al juez de línea. Todo venía por la decisión del colegiado de anular el gol de Fermín en el último suspiro por un fuera de juego claro, si bien las protestas del seleccionador eran motivadas por una falta previa sobre Fornals que no fue señalada y que podría haber concedido a su equipo otra posibilidad para conseguir los tres puntos y firmar una fase de clasificación perfecta. Sin duda, un calentón poco habitual en el siempre comedido entrenador de Haro, que quiso restarle trascendencia al asunto en la posterior rueda de prensa. "No me he dado cuenta", zanjó.