Ha hablado Machín por primera vez desde su salida del Sevilla y se han disparado los comentarios y, tras comentar que
volvería "con los ojos cerrados" sin cerrar
la posibilidad de fichar por el Betis, lógico porque ahora está en paro, se han disparado los comentarios y las especulaciones. ¿
Habría triunfado Machín con una buena planificación o con futbolistas adecuados para su sistema de juego? ¿Ha sido una oportunidad perdida por ambas partes, técnico y club?
El sorprendente arranque liguero disparó las expectativas y el cartel de Machín, pero tanto las ilusiones como las prestaciones del técnico se fueron desvaneciendo con el paso de los partidos.
Las múltiples lesiones, en especial la de Gonalons -clave para el equilibrio defensivo, como se ha comprobado también con Caparrós-; y los ridículos acumulados en Copa (6-1 en el Nou Camp, al que llegó con un 2-0-) y en la Europa League (4-3 en Praga ante el Slavia tras el 2-2 de Nervión) pedían a gritos su despido.
Machín ya es historia y su pasado nos deja unas conclusiones. No tuvo buena suerte en el Sevilla y no es el único culpable de su fracaso. Ni el plantel se hizo a su medida, ni era tan bueno como se pensaba. Pero su adiós fue un acierto. El 'efecto Caparrós', aunque ya difuminado, ha permitido mantener opciones Champions y ha garantizado la clasificación europea.
Joaquín Adorna
