Qué mejor sucesor para el
Sevilla FC en el trono de campeón de la
Europa League que un grupo como el del
Villarreal que cuente con
un sevillista de cuna y otros tres aficionados que el conjunto nervionense ganó para toda la vida después del poderoso
nexo unión generado, precisamente, tocando juntos la plata de la segunda competición continental de clubes.
Alberto Moreno, Carlos
Bacca y Vicente
Iborra, adiestrados por
Unai Emery, optarán este miércoles en Polonia a volver a degustar el éxito que ya saborearon defendiendo la blanquirroja.
Todos han jugado varias finales de la UEL. El delantero colombiano estuvo en la tercera y fue
bigoleador en la cuarta del Sevilla FC jugada ésta también en tierras polacas
(Varsovia); el centrocampista valenciano conquistó las
tres seguidas bajo el mandato del técnico vasco, que llegó a otra final con el Arsenal, aunque cayó frente al Chelsea. El lateral zurdo, del sevillano Cerro del Águila, participó en la de
Turín y repitió experiencia en
Basilea, aunque esta vez en el bando contrario: el de un
Liverpool que le eligió como
víctima propiciatoria de su derrota y
centro de una diana de críticas que, aún a día de hoy,
no logra entender.
"En el primer gol se marcharon de mí. Pero yo soy un defensa. Los jugadores superan a Sergio Ramos, el mejor central del mundo.
¿Por qué no me puede pasar a mí?", asegura en una entrevista en
The Guardian. "A día de hoy aún no entiendo por qué me criticaron tanto, cuando todo el equipo no jugó bien.
Es duro. No te lo puedes quitar de la cabeza. Miras el periódico, las redes sociales y lees cosas. 'Alberto, Alberto, Alberto'...
Me iré a la tumba sin entender por qué me echaron toda la culpa", continúa explicando en 'The Guardian'.
El cerreño tiene este miércoles contra el United una oportunidad de
volver a ganar la Europa League y quitarse esa espina, con el público inglés como espectador, y sentir esa sensación única experimentada tras levantar el trofeo con el Sevilla en el año
2014, ante el
Benfica: "Ya les he dicho a algunos de mis compañeros de equipo:
'Espero que ganemos sólo para que puedas sentir lo que es;
te vas a volver loco, no te lo vas a creer'", asegura un jugador que sabe lo que es
llorar en una final de la Europa League: primero de
emoción y alegría y luego de rabia y frustración.
Una de las grandes bazas para el optimismo que tiene Alberto es contar con Emery, pues le conoce del Sevilla FC y sabe de su metódica preparación de los partidos, de sus interminables sesiones de vídeo, de su obsesión por controlar todos los detalles... "Los jugadores hablan de ello:
'Pfff , otro vídeo'. Pero juegas bien porque has pasado una hora observando a tus oponentes.
Emery lo sabe todo. Cuando terminamos de prepararnos, sabremos cuántos hijos tienen Cavani y Pogba", bromea.
La muerte de Reyes
La final de la Europa League entre Sevilla y Liverpool fue -junto a las lesiones- uno de los peores momentos de la carrera de Alberto Moreno. Otro de los tragos más duros de su vida deportiva y también personal lo atravesó justo
antes de convertirse en campeón de la Champions. El jugador del Villarreal se despertó el 1 de junio de 2019 en el hotel de concentración pensando en la final ante el Tottenham y se encontró con la
noticia de la repentina y trágica muerte de un ser querido: José Antonio Reyes.
"Bajas a desayunar y lo único que piensas es en la final. Y luego ves las noticias...
José Antonio era un buen amigo.
Todo lo que hice ese día fue llorar. No comí. Encendí la televisión y todo se trataba de Reyes. Lloraba como un niño", relata apenado.
"Klopp vino a dar el pésame. Me preguntó cómo estaba, si podía afrontarlo, qué quería hacer. Le dije que estaba triste, que habíamos pasado por muchas cosas juntos, pero que estaba listo. Aunque no jugué,
lo único que quería era ganar para dedicárselo", explica.