Sevilla FC 3-0 Córdoba: Recuperando la confianza
Los de Unai Emery recuperaron sus señas de identidad y se mostraron muy superiores a un Córdoba que no se vio nunca con opciones ante la gran intensidad sevillista.
Partido muy serio del Sevilla que solventó de manera muy efectiva entre el final del primer tiempo y el comienzo del segundo. Los de Unai llevaron todo el peso del partido, con fases de largas posesiones de balón y dos jugadores determinantes en el día de hoy: la determinación de Banega y la magia de Reyes.
El Sevilla no quiso dejar margen a la duda y desde el principio quiso tener el dominio del partido. El once que presentó Unai presentaba como sorpresa la inclusión de Aleix como carrilero, algo que resultaría determinante en el desarrollo del partido. No obstante, sus llegadas siempre solían morir en la frontal del área cordobesista. Los visitantes venían con las ideas claras: sabían que tenían que sorprender a los de Unai Emery a la contra. Por eso, tras un par de ocasiones claras, los cordobesistas encontraron el punto débil de la escuadra local, como era su banda derecha. Aleix Vidal fue colocado como carrilero derecho, y esto lo interpretó Djukic como una vía de escape para sus contragolpes, así que colocó a su hombre más veloz, Héldon Ramos, con el que consiguió asustar en dos ocasiones a los de Nervión, pero sendos remates de Ghilas fueron infructuosos.
Emery se dio cuenta y basculó al equipo un poco a su zona derecha y lo echó hacia delante, algo que funcionó muy bien, pues arrinconó al Córdoba en su campo. Prueba de ello era el 72% de posesión que tenía el Sevilla rondando el minuto 35, monopolizando el balón pero sin encontrar huecos en la zaga califa.
La insistencia tuvo fruto, ya que uno de los córners provocados por Aleix terminó con un centro de Reyes que remató a placer Krychowiak al fondo de la portería ante la pasividad de la defensa cordobesista. A partir de ahí el Córdoba se descompuso, y los locales pusieron un plus de intensidad para aprovecharlo y tratar de cerrar el marcador. En una de las clásicas jugadas de los de Unai Emery llegó el segundo gol antes del descanso. Pareja levantó la cabeza y mandó un preciso balón a la espalda de la defensa visitante que cazó Vitolo y cedió a Bacca para que marcase a placer. En un par de minutos, Djukic había visto como el Sevilla había cerrado prácticamente el partido.
Tras el descanso, el técnico serbio intentó sorprender metiendo a jugadores más rápidos, como Ekeng y Bebé. Sin embargo, el Sevilla no quiso dar lugar a sorpresas, por lo que mantuvo la intensidad y la presión arriba para evitar que los cordobeses se crecieran. Esto se tradujo en dos claras oportunidades para los sevillistas. La primera para Bacca, que cazó un balón filtrado por Reyes y remató cerca de la meta de Juan Carlos mientras se estaba cayendo. La segunda fue aún mejor, cuando Reyes volvió a poner otro gran centro desde la banda y Carriço remató a bocajarro contra el larguero.
El partido terminó rompiéndose en el minuto 51, cuando el recién entrado Ekeng se autoexpulsó dando una patada sin balón a Vitolo, durando de esta manera apenas 6 minutos sobre el campo. Djukic intentó asentar a su equipo quitando a uno de sus mejores hombres hasta el momento, como era Hélder para dar entrada a un centrocampista posicional como Abel Gómez. A partir de entonces fueron los mejores minutos sevillistas. Banega y Reyes se echaron el equipo a sus espaldas y movieron de manera efectiva a los cordobeses haciéndole mucho daño por bandas.
La tónica cambió cuando entro Deulofeu sustituyendo a Reyes, centrando el catalán las vías de ataque a través de jugadas individuales. En el 72' tuvo lugar la peor noticia para el Sevilla en el día de hoy, ya que Krychowiak ensució su correcto partido haciendo una fea entrada con los tacos por delante sobre Khrin, que significó la expulsión automática del polaco, lo que supone que no podrá jugar en Anoeta.
Los últimos minutos solo sirvieron para dar minutos al joven delantero Carlos Fernández y a Denis Suárez, además de que el Córdoba intentó hacer un gol pero se encontró en un par de ocasiones con un serio Sergio Rico.
Con esta victoria, el Sevilla recupera de manera momentánea su plaza Champions y se coloca un punto por encima del Valencia a expensas del partido de mañana de los che contra el Getafe. Además, recupera la confianza tras los dos últimos resultados negativos de cara al jueves, cuando vuelve la Europa League y reciben en Nervión al Borussia Mönchengladbach.
-Ficha técnica:
Sevilla F.C.: S. Rico, Aleix Vidal, Pareja, Carriço, F. Navarro, Krychowiak, Iborra, Reyes (Deulofeu 62'), Banega, Vitolo (Denis 83'), Bacca (Carlos Fernández 82').
Córdoba: Juan Carlos, Gunino, Pantic, Crespo, Edimar, Deivid (Ekenkg 45'), Zuculini (Bebé 45'), Krhin, Fede Cartabia, Ghilas, Heldon (Abel 55').
Árbitro: Vicandi Garrido (Col. Vasco). Mostró tarjeta amarilla a Krhin y tarjeta roja a Ekeng y Krychowiak.
El Sevilla no quiso dejar margen a la duda y desde el principio quiso tener el dominio del partido. El once que presentó Unai presentaba como sorpresa la inclusión de Aleix como carrilero, algo que resultaría determinante en el desarrollo del partido. No obstante, sus llegadas siempre solían morir en la frontal del área cordobesista. Los visitantes venían con las ideas claras: sabían que tenían que sorprender a los de Unai Emery a la contra. Por eso, tras un par de ocasiones claras, los cordobesistas encontraron el punto débil de la escuadra local, como era su banda derecha. Aleix Vidal fue colocado como carrilero derecho, y esto lo interpretó Djukic como una vía de escape para sus contragolpes, así que colocó a su hombre más veloz, Héldon Ramos, con el que consiguió asustar en dos ocasiones a los de Nervión, pero sendos remates de Ghilas fueron infructuosos.
Emery se dio cuenta y basculó al equipo un poco a su zona derecha y lo echó hacia delante, algo que funcionó muy bien, pues arrinconó al Córdoba en su campo. Prueba de ello era el 72% de posesión que tenía el Sevilla rondando el minuto 35, monopolizando el balón pero sin encontrar huecos en la zaga califa.
La insistencia tuvo fruto, ya que uno de los córners provocados por Aleix terminó con un centro de Reyes que remató a placer Krychowiak al fondo de la portería ante la pasividad de la defensa cordobesista. A partir de ahí el Córdoba se descompuso, y los locales pusieron un plus de intensidad para aprovecharlo y tratar de cerrar el marcador. En una de las clásicas jugadas de los de Unai Emery llegó el segundo gol antes del descanso. Pareja levantó la cabeza y mandó un preciso balón a la espalda de la defensa visitante que cazó Vitolo y cedió a Bacca para que marcase a placer. En un par de minutos, Djukic había visto como el Sevilla había cerrado prácticamente el partido.
Tras el descanso, el técnico serbio intentó sorprender metiendo a jugadores más rápidos, como Ekeng y Bebé. Sin embargo, el Sevilla no quiso dar lugar a sorpresas, por lo que mantuvo la intensidad y la presión arriba para evitar que los cordobeses se crecieran. Esto se tradujo en dos claras oportunidades para los sevillistas. La primera para Bacca, que cazó un balón filtrado por Reyes y remató cerca de la meta de Juan Carlos mientras se estaba cayendo. La segunda fue aún mejor, cuando Reyes volvió a poner otro gran centro desde la banda y Carriço remató a bocajarro contra el larguero.
El partido terminó rompiéndose en el minuto 51, cuando el recién entrado Ekeng se autoexpulsó dando una patada sin balón a Vitolo, durando de esta manera apenas 6 minutos sobre el campo. Djukic intentó asentar a su equipo quitando a uno de sus mejores hombres hasta el momento, como era Hélder para dar entrada a un centrocampista posicional como Abel Gómez. A partir de entonces fueron los mejores minutos sevillistas. Banega y Reyes se echaron el equipo a sus espaldas y movieron de manera efectiva a los cordobeses haciéndole mucho daño por bandas.
La tónica cambió cuando entro Deulofeu sustituyendo a Reyes, centrando el catalán las vías de ataque a través de jugadas individuales. En el 72' tuvo lugar la peor noticia para el Sevilla en el día de hoy, ya que Krychowiak ensució su correcto partido haciendo una fea entrada con los tacos por delante sobre Khrin, que significó la expulsión automática del polaco, lo que supone que no podrá jugar en Anoeta.
Los últimos minutos solo sirvieron para dar minutos al joven delantero Carlos Fernández y a Denis Suárez, además de que el Córdoba intentó hacer un gol pero se encontró en un par de ocasiones con un serio Sergio Rico.
Con esta victoria, el Sevilla recupera de manera momentánea su plaza Champions y se coloca un punto por encima del Valencia a expensas del partido de mañana de los che contra el Getafe. Además, recupera la confianza tras los dos últimos resultados negativos de cara al jueves, cuando vuelve la Europa League y reciben en Nervión al Borussia Mönchengladbach.
-Ficha técnica:
Sevilla F.C.: S. Rico, Aleix Vidal, Pareja, Carriço, F. Navarro, Krychowiak, Iborra, Reyes (Deulofeu 62'), Banega, Vitolo (Denis 83'), Bacca (Carlos Fernández 82').
Córdoba: Juan Carlos, Gunino, Pantic, Crespo, Edimar, Deivid (Ekenkg 45'), Zuculini (Bebé 45'), Krhin, Fede Cartabia, Ghilas, Heldon (Abel 55').
Árbitro: Vicandi Garrido (Col. Vasco). Mostró tarjeta amarilla a Krhin y tarjeta roja a Ekeng y Krychowiak.