Francisco Salas3 min lecturaEl tenis vive un momento crucial del año, con el inicio de la gira europea de tierra batida en el tercer Master 1000 del año, el de Montecarlo, donde el año pasado se ausentaron algunos de los mejores, pero este año estarán todos menos uno, Rafa Nadal, que anunció el jueves que no podría estar por que su cuerpo no le "deja", en un mensaje muy poco esperanzador de cara a la que iba a ser su última temporada en el circuito, como anunció el año pasado, cuando paró después de no poder estar precisamente en ninguno de los torneos que vienen en los próximos dos meses.
Montecarlo, Barcelona, Madrid, Roma y París, ese era el calendario que manejaba el manacorí, para darse una última oportunidad de deslumbrar al mundo en los torneos que le hicieron grande. No solo tratar de levantar su decimoquinta Copa de los Mosqueteros, si no que este 2024 iba a tener la oportunidad de conseguir su segunda medalla de oro olímpica precisamente en la Philippe Chatrier, donde se disputará el tenis en los Juegos Olímpicos de París. Pero ahora mismo su objetivo es simplemente volver a saltar a pista de forma competitiva, algo que sabremos si es posible dentro de muy poco.
Debido a la ausencia de Rafa en el Principado monegasco, el que se ha acordado de él ha sido su máximo rival, Novak Djokovic, quién vuelve a la acción tras su muy sorprendente derrota en Indian Wells ante Luca Nardi y la posterior renuncia a Miami. 'Nole' catalogó al español como "una leyenda de este deporte", y remarcó que él "como fan del tenis", espera que pueda estar en Roland Garros compitiendo al máximo nivel, además de señalar la importancia de que él mismo sea el dueño de su destino, y no se vea obligado por las lesiones a irse antes de lo deseado. "Es importante para el tenis que pueda jugar, sobre todo este año, donde ha dicho que puede ser su último. Nadie excepto él tiene el derecho de decir lo que es bueno para él”. En todo caso, la decisión de Nadal va a tener que ser meditada en poco tiempo, que el próximo lunes 15 empieza el Conde de Godó y el día 22 de abril el Mutua Madrid Open, en la que serían las últimas oportunidades de despedirse en 'casa' sobre arcilla, aunque eso sí, el gran objetivo sigue siendo París, donde aún tiene seis semanas para estar preparado para poder rendir al máximo nivel.