Chus Mateo apunta a Pablo Laso y 'presiona' a Ricky Rubio

El nuevo seleccionador nacional no ha dudado en analizar la situación que se ha encontrado en el conjunto español

Chus Mateo apunta a Pablo Laso y 'presiona' a Ricky Rubio
Chus MAteo, nuevo seleccionador nacional español - @RMBaloncesto

La Supercopa de España unió en Málaga a casi todos los que han sido protagonistas este verano. Allí, lógicamente, estuvo Sergio Scariolo como técnico del Madrid, allí acudió Chus Mateo como seleccionador nacional y una de las nuevas cabezas visibles de la FEB y allí estaba Pablo Laso, en su caso, como analista y comentarista de DAZN, ya que se estrenaba en ese torneo.

A principios de esta pasada semana se había hecho oficial el fichaje del exentrenador madridista Chus Mateo como nuevo seleccionador nacional. El preparador madrileño tiene ante sí muchos retos, aunque el principal es devolver a España a la lucha por las medallas después de los últimos varapalos. Sobre eso, sobre Ricky Rubio o sobre lo que significa para él ocupar ese puesto ha hablado Mateo en Radiogaceta de Radio Nacional de España (RNE), donde ha dejado clara cuál es su máxima prioridad con España.

"Sabemos la imperiosa necesidad de estar en el Mundial de Qatar, pero la medalla será hacer un buen plan de futuro para que nuestro baloncesto pueda alcanzar el nivel que siempre ha mantenido gracias a los clubes, al trabajo de los entrenadores españoles y al trabajo de los jugadores", advierte el madrileño, que sabe que no va a tener mucho tiempo para empezar a competir y tiene que elegir un equipo válido fuera de los equipos de la Euroliga. "Tenemos una clasificación muy cercana, con las ventanas en noviembre y febrero, y en verano nos tenemos que acercar al Mundial. Tenemos que tratar de dar paso a generaciones nuevas, que vienen pisando fuerte y llamando fuerte a la puerta, como hemos visto en el último Europeo", añadía.

Chus Mateo se fija en Scariolo

Chus Mateo no quiere cargarse la presión de igualar a Scariolo, ya que el italiano ha marcado una época casi imposible de superar, pero avisa que España va a dar guerra. "No son las mismas generaciones, pero hay que ser optimista. Hemos hecho un Campeonato de Europa en el que ha habido cosas positivas. Hemos visto jugadores que seguramente no han dado su mejor nivel, pero que era la primera vez que se encontraban solos liderando a la selección española. Luego hemos descubierto también jugadores jóvenes que han roto la puerta y que quieren hacerse un sitio", señalaba sobre un De Larrea con el que disfrutó mucho en la Supercopa de Málaga.

Eso sí, sabe lo que hereda, porque ha sido un alumno aventajado del italiano. "He estado seis años con él: en el Real Madrid, en Unicaja y en la selección nacional. La metodología de trabajar de una manera pautada, disciplinada, la he aprendido de él", señala un Chus Mateo que rechaza las comparaciones y pone de ejemplo a Laso. "No se trata de compararse con nadie ni los momentos son parecidos. Pablo -Laso- en el Real Madrid hizo historia y es imposible igualar lo que Pablo ha hecho en esa época de éxitos del Real Madrid. Yo he tratado de hacer lo que he podido en estos tres años en los que he sido muy feliz, pero esa etapa se acabó y empieza otra como seleccionador, de la que quiero sentirme muy orgulloso por dejarme la piel en el esfuerzo. Eso no va a faltar", avisa.

Por eso, quiere asumir el proceso con tranquilidad. "No vamos a volvernos locos muy pronto, hay que tener un cierto criterio a la hora de hacer las cosas. No debemos apresurarnos a tomar decisiones. (...) Hay que elegir bien y elegir con sabiduría a los mejores para representar a nuestra selección y a nuestro país también es algo que requiere de cierta pausa", afirma también sobre si va a echar de menos el día a día.

Mateo quiere pensar ante todo en las ventanas de clasificación para el Mundial de Qatar, que arrancan en pocas semanas, y sobre las que avisa que tienen "un nivel de baloncesto muy alto". Y deja, por último un mensaje para Ricky Rubio, al que podría llamar al estar en un Joventut que este año juega competiciones FIBA. "Yo no puedo, en ningún caso, buscar su compromiso 100% ahora mismo, ni exigirle que él lo haga público. Él tiene lo que tiene que hacer es jugar, divertirse, sentirse él mismo, ver cómo se va encontrando, y cuando diga 'Chus, quiero estar contigo', a Ricky Rubio se le va a dejar seguro", señala.