El
Betis, según confesaron públicamente sus dirigentes en los últimos días, lleva varias semanas hablando con
Quique Setién para prolongar la vinculación que les une, a la que le queda algo más de año y medio de vigencia, si bien esas conversaciones se mantienen en un ámbito estrictamente privado, sin la intervención todavía del representante del entrenador.
Así lo
confirmaba ayer a ESTADIO Deportivo el propio Edoardo Crnjar, que atendió amablemente la llamada de este periódico para aclarar que ha estado "recientemente" en la capital hispalense, pero no para avanzar en este asunto, ya que viene "todos los meses para ver y saludar", si bien "no hay ninguna negociación para renovar ni nada por el estilo".
El intermediario, que sí dejó entrever que conoce la
voluntad de ambas partes de seguir vinculados más allá de los tres años convenidos hace dos veranos, está al margen por el momento de una toma de contacto que sí es formal en 'petit comité'.
De hecho,
Setién conoce de boca de
Ángel Haro,
José Miguel López Catalán y
Lorenzo Serra Ferrer, las otras tres 'patas' del 'banco' heliopolitano, que desean su continuidad. Al santanderino le gusta lo que escucha y hace propuestas para mejorar una entente ya de por sí 'cordiale', aunque no ha tomado una decisión definitiva ni cree que sea éste el momento idóneo para hacerlo.
En cualquier caso, ha hecho ver a los dirigentes verdiblancos que la
clave de su permanencia no será el aspecto económico, un aspecto que, como el farragoso de los contratos y las cláusulas, discutiría, llegado el caso, su agente en el futuro, sino que participe en la toma de decisiones deportivas y que se busque el consenso también en otras cuestiones de carácter logístico, de infraestructura, etcétera. Los guiños desde la planta noble del
Benito Villamarín, como cuando se resembraron los dos campos principales de la
Ciudad Deportiva Luis del Sol nada más exteriorizar Setién su descontento con ellos y cuando se anunció de que se construirá un nuevo espacio para la cantera que descargará el césped de
Los Bermejales, son una realidad bien recibida.
El míster sí ha pulsado ya la opinión de
Eder Sarabia y
Jon Pascua, su equipo más directo de trabajo, con los que querría seguir si decide renovar.
Óscar Murillo3 min lectura