Se empeña
el Betis en los últimos años en contravenir la frase que popularizó Judy Garland en la versión cinematográfica de 'El mago de Oz', ese clásico para los niños y no tan niños de 1939 que, según dicen los expertos, poco o nada tiene que ver con la novela homónima de principios del siglo XX.
La sentencia la firmaría la inmensa mayoría de los mortales, aunque en fútbol, paradójicamente, la presión añadida que supone jugar ante tu público propicia que, en ocasiones, se esté mejor fuera de casa, donde la exigencia es la misma, pero siempre menor que la del anfitrión.
Sea como fuere, a los de Setién y al propio entrenador cántabro les toca ahora echar raíces, pues se avecinan cuatro partidos seguidos en la
Avenida de La Palmera en los que los verdiblancos se examinan en todos los sentidos, más aún tras el último fiasco en
Villarreal.
De momento, el irregular conjunto heliopolitano ha firmado mejores encuentros a domicilio que como local, con exhibiciones en
San Siro y el Camp Nou incluidas. Más allá del derbi, resuelto a favor sobre la bocina con un gol de Joaquín, no ha habido ese gran golpe en la mesa en el
Benito Villamarín que enganche a una grada entregada e incondicional que, sin embargo, exige también lo mismo a cambio.
El primero de los cuatro encuentros consecutivos al abrigo de los suyos llega esta tarde (18:55 horas) ante el enrachado
Olympiacos, que ha sumado diecinueve de los últimos 21 puntos oficiales por los que peleó. Ganar a los griegos tendría un doble valor para el
Betis, ya que, más allá del impulso anímico, brindaría la clasificación matemática para los dieciseisavos de final de la
Europa League, sin tener que estar pendiente de lo que haga el Milan ni tener que viajar a Luxemburgo en la última jornada con más en juego que el liderato del Grupo F. Ése será el paso inicial, pues, a continuación, tocará remontar posiciones en
LaLiga ante la Real Sociedad, más peligrosa también fuera que en
Anoeta, y el necesitado
Rayo Vallecano. Entre medias, la vuelta copera ante el
Racing, uno de esos partidos trampa en los que cualquier cosa distinta a un triunfo holgado sería un fracaso.
En el plano estrictamente deportivo,
Setién tiene a todos disponibles, por lo que habrá de realizar descartes en su citación. Habrá rotaciones, pues hombres como
Pau López y los renqueantes
Sidnei y Mandi podrían tener descanso, lo mismo que ocurre con Junior; otros como
Barragán, Joel, Javi García, Tello, Sanabria o Boudebouz necesitan y esperan minutos.