El Betis financiará la obra en el césped con los conciertos

En el Betis, mucho más en el plano extradeportivo, está todo pensado. La gestión del club como una empresa, en la que se busca siempre las máximas rentabilidad y eficiencia, era uno de los objetivos del consejo de administración que encabeza Ángel Haro, por lo que se rodeó de especialistas en cada departamento para explotar convenientemente los recursos de una institución, hasta la fecha, manejada de manera algo más artesanal.

En este tiempo, la incorporación de profesionales reputados a cada área se ha visto materializada en muchas medidas que, de una manera u otra, han aportado beneficios a la institución, que, cumpliendo con las obligaciones del proceso concursal prácticamente extinto -la fase de convenio está cerca de finalizar- y de LaLiga, se han destinado a la parcela deportiva, que es la que sustenta todo.

Así, según ha podido saber ESTADIO Deportivo, los dos próximos conciertos que acogerá el Benito Villamarín generarán unos ingresos que ya tienen destino: el césped del coliseo de La Palmera. Y es que el recinto heliopolitano albergará el inicio de la gira 2019 de Alejandro Sanz el 1 de junio y, justo una semana después, pasará por él el tour de la última edición de Operación Triunfo. Será ya una vez terminada la temporada, pues el último partido de Liga en casa se disputará el segundo fin de semana de mayo, al tiempo que la final de la Copa del Rey, a cuya organización opta también el Betis, se jugaría el sábado 25 de ese mismo mes.

A los responsables verdiblancos no les preocupan los posibles daños que la aglomeración prevista para los citados espectáculos musicales provoque en el tapete, pues su idea era, de todas formas, sustituirlo. Y algo más: el plan pasa por hundirlo entre 80 centímetros y un metro para ganar visibilidad en las gradas, lo cual elevaría obviamente los costes. El problema ahora es que el club no puede vender las tres primeras filas de Gol Norte, Gol Sur y Fondo, que están por debajo del nivel actual del césped, como también ocurre con los banquillos, ubicados delante del graderío de Preferencia.

Tras esta remodelación, el aforo para la 19/20 volvería a superar los 60.000 espectadores, con más posibilidades de ingresos.