La oferta del conjunto culé no llega a los
20 millones, con pluses incluidos y abonada en varios plazos. Además, desde la ciudad condal insisten en abaratar el fichaje con jugadores, algunos de los cuales no quieren venir, no interesan o no están dispuestos a formar parte del trato, al menos que se negocie su situación al margen de la operación por el hispano-dominicano.
Nombres como los de
Cucurella, que acaba de ser recomprado por el
Barcelona, Miranda, un jugador que gusta mucho en el
Betis, equipo del que salió, o
Rafinha, la opción número uno el verano pasado antes de que llegase
Giovani Lo Celso, han aparecido en una hipotética lista de jugadores que el Barcelona incluiría en la operación, pero el
Betis por menos de
30 millones no empieza a negociar.
El jugador, por su parte, tampoco está presionando para irse, aunque es consciente de su atractivo en el mercado. Al margen de la del Barça, el club maneja una propuesta. Sea como fuere, en el club quieren acelerar esta operación para garantizarse ‘cash’ con el que cerrar ya de una vez por toda a
Borja Iglesias, que empieza a impacientarse.