Juan Ayuso dice adiós
En la primera etapa de montaña el joven ciclista español 'presenta su renuncia' al descolgarse de un grupo de favoritos que contaba aún con muchos integrantes

Juan Ayuso tenía dudas y estas se han visto confirmadas a las primeras de cambio. El talentoso ciclista español llegaba a La Vuelta a España sin haber realizado una preparación específica y él mismo admitía que no tenía claro cómo respondería cuando la carretera se empinase. Pues bien, ha llegado la sexta etapa, el primer final en alto y ha dicho adiós a sus aspiraciones a la clasificación general.
A más de 5 kilómetros de meta camino de Pal, y pese a que no se trataba de un terreno demasiado duro, Ayuso fue perdiendo posiciones en un grupo de no menos de 40 integrantes para dejar claro que no está en un óptimo estado de forma y que su precipitada 'convocatoria' para la ronda española respondía más a una necesidad del equipo por la negativa de Tadej Pogacar que a aspiraciones reales por su parte.
En términos numéricos hablamos de que el barcelonés entró en meta a 11 minutos y 51 segundos del ganador, su compañero Jay Vine, dejándose más de siete minutos con su también compañero Joao Almeida y con el gran favorito a llegar de rojo a Madrid, el dos veces ganador del Tour de Francia Jonas Vingegaard.
Esta 'desgracia' supone un golpe más para el ciclismo español. Antes del inicio de La Vuelta el aficionado ya sabía que no vería a Enric Mas ni a Carlos Rodríguez, ambos lesionados, y ahora se suma a ese 'adiós' la única baza que hay para la clasificación general junto a Mikel Landa que se defendió hasta el punto de alcanzar la meta a solo 28 segundos de los mejores.
¿Qué pasa ahora con Juan Ayuso?
Es la gran pregunta. Es obvio que pese a decirlo con la boca pequeña el de UAE llegaba con aspiraciones a brillar en la clasificación general, llegando a asegurar que supeditaba su apoyo (o ayuda) a Joao Almeida a no estar él mismo metido en la lucha por los primeros puestos. Ahora esa situación es ya un hecho; sin embargo, el estatus de Ayuso hace que resulte extraño pensar en que estará el resto de La Vuelta a las órdenes del luso.
Si bien servir de apoyo a Almeida se da por hecho en momentos puntuales, el plan más lógico apunta a ser que el catalán corra con libertad en busca de un triunfo de etapa y, quién sabe, pillar una fuga bidón que le permita acercarse a los mejores de la carrera.