La UCI amenaza a España tras La Vuelta

A lo largo de las dos últimas semanas de la Vuelta a España 2025 se ha hablado casi más de política que de deporte. Se ha conocido el parecer de la organización, de los ciclistas, del equipo Israel y también de muchos políticos en España.

En este sentido, el director de la ronda española, Javier Guillén, siempre ha dejado claro que él no tenía nada que ver con la presencia o no del conjunto israelí y que eso es decisión de la UCI, que se ha callado todo el tiempo y no han dado su opinión pese a todo lo que estaba ocurriendo en España. Hasta hoy...

El máximo organismo del ciclismo internacional ha dejado claro lo que opina de lo vivido en España y no se ha andado con medias tintas. Sus palabras suenan claramente a amenaza.

En este sentido, la UCI no sólo se ha referido a la última etapa, que se cortó a la mitad, sino que hizo balance de lo vivido desde los primeros cortes, en la contrarreloj de Figueras, la primera etapa en suelo español. "La Vuelta se ha visto perturbada casi a diario por acciones de carácter militante (...) Intrusiones de individuos en el pelotón, lanzamiento de orina y puesta en peligro de los corredores, atentando contra su integridad física, ya que algunos sufrieron caídas, lesiones y se vieron obligados a abandonar la prueba... Ante estos incidentes, los organizadores de la carrera reaccionaron con rapidez y serenidad, implementando medidas de emergencia para garantizar la continuidad de la prueba. Han actuado con una profesionalidad ejemplar, respetando la autonomía y la independencia del deporte", indican antes de avisar que estos actos constituyen "una grave violación de la Carta Olímpica y de los principios fundamentales del deporte".

España, en tela de juicio para organizar eventos

Tras señalar directamente al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, por sus palabras de este lunes, en las que presionaba a la UCI y al resto de organismos deportivos internacionales para que echaran a los representantes de Israel, asegura que esta postura "pone en tela de juicio la capacidad de España para acoger grandes eventos deportivos internacionales garantizando su buen desarrollo en condiciones de seguridad y de conformidad con los principios de la Carta Olímpica".

Tras esta advertencia tan clara, el organismo ciclista internacional acude una vez más a la Carta Olímpica para justificar sus palabras: "La UCI condena de manera firme la instrumentalización del deporte con fines políticos en general, y en particular por parte de un gobierno. El deporte debe seguir siendo autónomo para cumplir su papel como herramienta al servicio de la paz. Resulta inaceptable y contraproducente que nuestro deporte se desvíe de su misión universal. Además, existen plataformas específicas que permiten a los Estados debatir sus divergencias. (...) El deporte debe unir, nunca dividir", añade.

La UCI respalda a los organizadores de La Vuelta

La UCI también se pone de parte de los organizadores de la Vuelta a España, a los que defiende y considera víctimas de todo lo vivido. Javier Guillen ya dijo en su comparecencia posterior a la finalización de la Vuelta a España que habían estado en todo momento en contacto con la UCI y que ésta le había dejado claro que el Israel-Premier Tech debía continuar.

"Se habló con la UCI, le dijimos que tomara posición y la tomó, era la de mantener al equipo de Israel en carrera. No hay ni una sola federación internacional que haya vetado o excluido a equipos de Israel en sus competiciones. Ningún país, que yo sepa, ha prohibido ningún tipo de actividad deportiva a deportistas de Israel. Fue la decisión de la UCI, es muy conocedora de lo que ha pasado, serán los organismos internacionales los que tengan que gestionar la situación", afirmó el director de la Vuelta a España.

"La Vuelta siempre se ha mantenido neutral. Hay conversaciones, pero la UCI dijo que el equipo tenía que correr, tampoco el equipo ha decidido que se quería ir, y teníamos que hacer lo que creo que hemos hechos", insistía Guillén.