Tadej Pogacar echa la culpa al viento de no haber ganado en la Amstel Gold Race

El ciclista del UAE Team Emirates desvela el motivo que le impidió culminar su escapada en la Amstel Gold Race 2025

Tadej Pogacar echa la culpa al viento de no haber ganado en la Amstel Gold Race
Tadej Pogacar, en el podio - @Amstelgoldrace

La 59 edición de la Amstel Gold Race dejó una imagen para la historia. Hasta ahora, nadie había cazado a Tadej Pogacar cuando el esloveno se había escapado en las carreras de un día. Esta vez, pese a tenía una cómoda ventaja, vio cómo Evenepoel y Skjelmose se unían a él a 8 km de meta y se tuvo que jugar con ellos la victoria en la Clásica de la Cerveza, una carrera que se llevó el danés, por delante del esloveno y del belga, los dos grades favoritos.

Pogacar trató de justificar los motivos que le habían impedido aguantar su ventaja sobre los dos rivales que venían por detrás, que, viendo que el líder del UAE Team Emirates no se les iba, se cargaron de moral y apretaron hasta cogerlo. "El viento en contra fue demasiado fuerte en los últimos 15 kilómetros. Lo pagué caro", asumía el número uno del mundo en la línea de meta de la Amstel Gold Race.

"Me fui con Julian Alaphilippe y esperaba que pudiera quedarse conmigo más tiempo. Sin embargo, 5 km después ya estaba solo -a 42 de la meta-. Quizás me entusiasmé demasiado en ese primer ataque. Intenté aguantar solo, pero había dos rivales cerca... No pude ampliar la diferencia en los últimos 15 kilómetros debido al fuerte viento en contra, entonces decidí esperar más o menos y quería intentar ganarles al esprint. Fue una apuesta arriesgada y, al final, quedé segundo", resumía un Pogacar que ya vivió otro esprint nefasto en la Milán-San Remo, aunque ahí acabó tercero tras Van der Poel y Ganna.

Renco Evenepoel, feliz y frustrado al mismo tiempo

Todo se vaticinaba en una lucha entre él y un Evenepoel que el viernes ya demostró en la Flecha Brabanzona estar completamente recuperado de la dura caída que sufrió a final de 2024. Por eso, pese a que el segundo puesto de Pogacar le supo a poco, el gran derrotado del trío fue el belga del Soudal Quick Step.

Pese a ello, Evenepoel valoraba todo lo hecho y aseguraba haberse sentido capaz de ganarle a cualquiera. "Tengo sentimientos encontrados. Lo positivo es que vengo de una larga recuperación. Es solo mi segundo día de carrera y puedo volver a ser el hombre más fuerte del momento. Es motivador porque eso aún no había sucedido", indicó el doble campeón olímpico, quien fue el encargado de lanzar el esprint a 150 metros de la meta. Un error según reconocía posteriormente.

"Creo que empecé el esprint demasiado pronto. Había viento en contra y quizá debería haberme desviado más a la derecha, pero no soy un esprinter y no me atrevo a buscar más explicaciones. Si espero 50 metros más y, sin la caída, habría ganado la carrera. (...) Si hubiese ahorrado esa energía, quizá podría haber atacado en el Cauberg o intentar escaparme en solitario. Pero eso será para el año que viene", se resigna.

No obstante, le manda un aviso a Pogacar y a los rivales que se encontrará en la Flecha Valona -el miércoles- y en la Lieja-Bastoña-Lieja. "Estoy contento. He avanzado mucho. Hacer esto en una carrera de 6 horas solo me servirá para la próxima semana y más allá", avisa.