Kiko Rivera sufre otra dramática ruptura

Hay relaciones que parecen muy asentadas hasta que un día, de forma inesperada, se descubre que no es oro todo lo que reluce. Este es el caso del matrimonio entre Kiko Rivera e Irene Rosales, que pese a no haber mostrado ninguna crisis, este miércoles 27 de agosto ha salido a la luz su intención de separarse.

Ha sido la revista Semana la que ha confirmado esta separación, detallando también cuáles son los motivos de esta inesperada ruptura. La pareja, que lleva 9 años de matrimonio y tiene dos hijas en común, ha decidido poner punto y final a su historia, en una decisión que aseguran que ha sido de mutua acuerdo y con todo respeto y cariño.

Kiko Rivera se separa de Irene Rosales 9 años después

El hijo de la mítica cantante española, Isabel Pantoja, vuelve a atravesar un drama personal. Kiko Rivera ya vivió dramáticas separaciones con su familia, alejándose tanto de su madre como de su hermana, Isa Pantoja. Ahora, el DJ también se enfrenta a otra dolorosa separación, aunque según revela el medio esta vez se trata de una ruptura amistosa.

Lo fundamental tanto para Kiko como para Irene es llevar a cabo esta separación de la mejor manera posible y siempre mirado por sus dos hijas, Ana y Carlota, a quiénes priorizan ante todo. Así lo han demostrado en la que ya es su última fotografía juntos, publicada hace sólo dos semanas. Una estampa familiar de Kiko, Irene y sus hijos, también Francisco, de la relación anterior que tuvo el cantante con Jessica Bueno, disfrutando de unos días libres en Menorca.

Estas han sido las que ya se van a convertir en las últimas vacaciones de la pareja junta, que ha decidido separar sus caminos, explicando cuáles son los motivos que les han llevado a tomar esta difícil decisión.

Los motivos de la ruptura entre Kiko Rivera e Irene Rosales

La pareja asegura que el motivo de su ruptura es el desgaste de la relación en el día a día, sin verse implicadas terceras personas ni ninguna gran crisis entre ellos. Ha sido el tiempo el que ha hecho mella en una relación que parecía sólida y estable, pero que ya va a comenzar a poner en marcha su separación. Por ambas partes han intentado salvar la relación en los últimos meses pero habrían llegado a un punto en el que han considerado que es mejor emprender vidas por separado.

Pese a que aún tienen muchos detalles por pulir, Kiko e Irene buscan ponerse de acuerdo en los puntos sobre su separación y seguirán teniéndose el mismo cariño y respeto que hasta ahora, siempre velando por el bien de sus hijas.