Manuel Luque (Lora): "Seguimos soñando aún"
Ser el mejor equipo de la segunda vuelta ha permitido a los rojiblancos recibir la ´invitación´ a luchar por el ascenso; Luque, míster loreño, es consciente de que el margen de error es mínimo, pero advierte que por ellos no va a quedar.
La atención esta semana en el Grupo II está puesta en el esperado Utrera-Castilleja del próximo domingo. Sin embargo, la igualdad y la gran segunda vuelta que está realizando el Lora hace que el conjunto dirigido por Manuel Luque se haya ganado por méritos propios ser uno de los animadores en el tramo final.
Sexto clasificado, a siete puntos del líder, el Castilleja, el entrenador tomareño no esconde la ilusión que se vive en el vestuario del Setefilla. "Somos los primeros en reconocer que sería un sueño. Seguimos soñando, pero con los pies en el suelo. Hace cinco o seis jornadas era imposible, aunque ahora el sueño se ve más cerca", expone el míster rojiblanco, advirtiendo que no van a renunciar a nada.
"Por nosotros, que no quede. El objetivo era la permanencia, pero después de todos los problemas que hemos pasado vamos a soñar. La dinámica es positiva y queremos competir. Nuestra intención era llegar a Pozoblanco (última jornada) jugándonos algo, aunque sabemos que si fallamos en un partido se acaba todo", declaró.
La metamorfosis loreña ha sido radical. En la primera vuelta (17 partidos) sumó 23 puntos, quedando a trece del líder. En la segunda, con trece partidos jugados, acumula 32, situándose a siete del primer clasificado. Luque explica las razones del cambio. "El equipo es muy joven y pagó los platos rotos en la primera vuelta. Había mucha calidad pero quizás faltaba más disciplina táctica, antes éramos anárquicos. Poco a poco nos hemos ido amoldando todos. Pusimos los puntos sobre las íes, marcamos roles y lo han aprovechado. Somos un equipo con chispa, dinámita arriba y sacrificado. Hemos hecho una familia y el club paga al día. Estamos a gusto", relata un Manuel Luque al que la entidad ribereña le ofreció la renovación el pasado 3 de enero en la comida de Navidad.
Sexto clasificado, a siete puntos del líder, el Castilleja, el entrenador tomareño no esconde la ilusión que se vive en el vestuario del Setefilla. "Somos los primeros en reconocer que sería un sueño. Seguimos soñando, pero con los pies en el suelo. Hace cinco o seis jornadas era imposible, aunque ahora el sueño se ve más cerca", expone el míster rojiblanco, advirtiendo que no van a renunciar a nada.
"Por nosotros, que no quede. El objetivo era la permanencia, pero después de todos los problemas que hemos pasado vamos a soñar. La dinámica es positiva y queremos competir. Nuestra intención era llegar a Pozoblanco (última jornada) jugándonos algo, aunque sabemos que si fallamos en un partido se acaba todo", declaró.
La metamorfosis loreña ha sido radical. En la primera vuelta (17 partidos) sumó 23 puntos, quedando a trece del líder. En la segunda, con trece partidos jugados, acumula 32, situándose a siete del primer clasificado. Luque explica las razones del cambio. "El equipo es muy joven y pagó los platos rotos en la primera vuelta. Había mucha calidad pero quizás faltaba más disciplina táctica, antes éramos anárquicos. Poco a poco nos hemos ido amoldando todos. Pusimos los puntos sobre las íes, marcamos roles y lo han aprovechado. Somos un equipo con chispa, dinámita arriba y sacrificado. Hemos hecho una familia y el club paga al día. Estamos a gusto", relata un Manuel Luque al que la entidad ribereña le ofreció la renovación el pasado 3 de enero en la comida de Navidad.