Durango 1-0 Écija: Un despiste que puede costar caro

El Écija cayó derrota do en el partido de ida ante la Cultural Durango y se agarra a San Pablo, con el apoyo de su afición, para darle la vuelta a la eliminatoria. Un despiste defensivo, en el minuto 84, culminado por Ekain decantó un duelo igualado, sobre todo en oportunidades, donde los locales mostraron un juego mucho más físico.

El comienzo fue para los vizcaínos que dominaron territorialmente gracias a una fuerte presión. Aún así, las ocasiones fueron escasas y el primer tiro con peligro fue sevillano cuando Juan Delgado cedió a la frontal para que Moyita disparara raso sin que Andoni, meta local, tuviera complicaciones para detener. Hasta el 25’, no se volvió a ver peligro. Fue, de nuevo, para el Écija. Juan Delgado aprovechó un pase atrás de la zaga vasca para quedarse sólo ante el portero, con tranquilidad cedió al corazón de área, donde estaba Alberto Castro que, con todo a favor, lanzó por encima del larguero, aunque bien es cierto que los astigitanos reclamaron penalti por un empujón en el momento del tiro. Respondió el cuadro local con un chut de Mallagaray que detuvo Fermín, pero fue en la recta final cuando el Écija vivió sus peores momentos. Primero con un centro del lateral zurdo Txapu que no encontró rematador en el área y luego con un cabezazo, a la salida de un córner, del ariete Mikel Pradera que golpeó en el palo.

Tras el paso por los vestuarios, los locales salieron con más fuerza apoyándose en un Pradera que, mediante el juego de espaldas, comprometía a los defensores azulinos. El propio Pradera, con un tiro duro que Fermín desvió a córner, y Ekain, lanzando fuera, tuvieron su oportunidad pero sin éxito.

Poco a poco, el Écija se fue recuperando y tuvo el gol. En el 78’, Ezequiel, tras verse habilitado por un taconazo de Alberto Castro, falló en el mano a mano ante Andoni mandando su tiro cruzado desviado. Acto seguido, fue Carmona quien pudo hacer el 0-1 pero su chut golpeó en el lateral del arco local.

Cuando todo parecía que no se movería, a siete minutos para el final, apareció la picaresca local. Falta a favor del Durango en la frontal del área, saque rápido, con el Écija despistado, hacia Aitor, el cual se internó en la zona de peligro para ceder a Ekain, que a puerta vacía y con Fermín batido, marcó el 1-0 que deja la eliminatoria muy abierta pero con la obligación de remontada para el Écija.