Álex Martín4 min lecturaLa temporada 23/24 ya es historia para el Atlético de Madrid, que ha vivido un curso de muchos altibajos y sobresaltos. A pesar de alcanzar los cuartos de final de la Champions y las semifinales de la Copa del Rey, las sensaciones, especialmente fuera de casa, no han sido las mejores para los de Simeone. Lo sucedido ante el Borussia Dortmund en Alemania, donde cayeron de forma contundente ante la gran sorpresa de la campaña en la máxima competición continental, ha abierto los ojos de la directiva. Desde las altas esferas, se tiene claro que se debe fichar, y hacerlo bien, para volver a competir de tú a tú con los mejores de Europa.
Eso va a requerir algunos sacrificios, muchos de ellos convertidos en salidas de jugadores que han sido importantes en la etapa del argentino al frente del banquillo de la entidad capitalina. Según lo que se ha reportado en los últimos días, hasta 10 futbolistas podrían dejar el vestuario del Atlético de Madrid, algunos de ellos con trayectorias brillantes en el cuadro del Metropolitano. Sobre uno de ellos, ha trascendido en las últimas horas que, definitivamente, no formará parte de la próxima plantilla atlética.
En las últimas temporadas, el ilicitano siempre ha estado en la rampa de salida. No hace tanto, se marchó cedido al Chelsea, en busca de tener más minutos y recuperar su mejor versión, aquella que enamoró a media Europa y que llevó al Atlético a renovarle hasta 2026. De esa etapa queda poco, y, debido a que Saúl no ha podido encontrarse a las órdenes de Simeone, ambas partes, tal y como apunta Matteo Moretto, entienden que lo mejor en estos momentos es separar sus caminos. No será sencillo, ya que, a lo largo de su trayectoria, ha estado durante 16 años en la capital de España. Será un momento traumático, pero el futbolista podría haber entendido que debe alejarse del Metropolitano para sacarse el bloqueo mental que le ha atenazado en las campañas pasadas.
A pesar de que, como se ha mencionado anteriormente, la idea del club en los últimos años era deshacerse de Saúl, su salario siempre lo ha impedido. Según lo que se desveló, percibía una cantidad de 15 millones brutos, algo que ha cerrado la puerta a numerosos equipos. Ahora, parece que no habrá problemas para que el centrocampista, que ha sido pocas veces titular durante la vigente temporada, abandone el Atlético de Madrid, que va a arrancar un nuevo ciclo y necesita a futbolistas jóvenes, con ganas de crecer y hambre de ganar y competir. El desgaste ha sido evidente, y lo mejor para las dos partes es que esta etapa, una de las más brillantes de la entidad, se acabe para dejar paso a las nuevas generaciones rojiblancas.
Señalado para abandonar Madrid, el centrocampista dejará espacio a nuevos futbolistas. Mats Wieffer, del Feyenoord, sería un candidato para reforzar la medular, pero no sería el único. En esta ocasión, el Atlético no tendría problemas para firmar a varios jugadores, tal y como ha desvelado Rubén Uría. Habría ingresos suficientes para afrontar numerosas operaciones que pueden darles un salto de calidad importante de cara a un curso que puede ser vital.