Joao Félix no se corta y da un 'palo' a Simeone

Joao Félix y el Atlético de Madrid separaron sus caminos en el mercado de fichajes de verano. El futbolista luso, una vez regresó al cuadro rojiblanco tras haber estado cedido en el Barcelona, decidió buscar un nuevo destino ya que no contaba para Simeone, que había dejado claro en varias ocasiones que no quería al portugués en la plantilla. El Chelsea pujó por él y se lo llevo, pero tras cinco meses, el delantero sale cedido rumbo al AC Milan. En la presentación, Joao Félix ha aprovechado para dar un 'palo' a Simeone con unas declaraciones que no dejan lugar a la interpretación.

Joao Félix y su 'recado' a Simeone

La relación entre Joao Félix y Simeone en el Atlético de Madrid era catastrófica. Desde su llegada, Joao Félix no se amoldó a lo que Simeone le exigía y el técnico argentino optó por dejar al luso en el banquillo ante lo que él consideraba "malos comportamientos". El futbolista nunca llegó a tener una relación estrecha con el entrenador y en gran parte era por su posición en el campo. A Joao Félix le gusta jugar en las inmediaciones del área, pero Simeone le reservaba un lugar más atrasado dónde el luso nunca se ha sentido cómodo. Es por ello y por su rendimiento en dicha posición que el Atlético de Madrid catalogó como fracaso su fichaje. Ahora, en su nueva etapa en Milán, Joao Félix quiere rehacerse de nuevo y manda un 'recado' a Simeone en la presentación con el equipo italiano. "No le pedí al AC Milan jugar todos los partidos, sólo que jugara en mi posición… y Sérgio Conceição quería exactamente ponerme en mi mejor posición. Para mí eso fue crucial elegir el AC Milan”, afirmó João Félix que no olvida su paso por el Atlético de Madrid y la posición en la que Simeone lo usó a pesar de que el portugués dejó claro, en varias ocasiones, que no estaba cómodo con ese rol asignado por el argentino.

El Atlético de Madrid se quita un peso de encima con Joao Félix

Aunque los caminos del Atlético de Madrid y de Joao Félix se hayan separados, el luso no olvida el calvario que vivió en el cuadro rojiblanco. Con su venta, el Atlético de Madrid se quitó un peso de encima y, aunque no recuperaron los 120 millones que se invirtieron en su fichaje, al equipo colchonero quería poner fin a la disputa entre club y jugador, por lo que se mantiene completamente al margen de lo que haga o diga el futbolista.